Mateo 1:19 - Versión Biblia Libre

¹⁹ José, su prometido, era un buen hombre y no quería avergonzarla públicamente, de modo que decidió romper el compromiso de manera discreta.

Más versiones

Biblia Reina Valera 1960

¹⁹ José su marido, como era justo, y no quería infamarla, quiso dejarla secretamente.

Biblia Nueva Traducción Viviente

¹⁹ José, su prometido, era un hombre justo y no quiso avergonzarla en público; por lo tanto, decidió romper el compromiso en privado.

Biblia Católica (Latinoamericana)

¹⁹ Su esposo, José, pensó despedirla, pero como era un hombre bueno, quiso actuar discretamente para no difamarla.

La Biblia Textual 3a Edicion

¹⁹ Y José su marido, que era justo, pero no quería denunciarla, se propuso repudiarla en secreto.°

Biblia Serafín de Ausejo 1975

¹⁹ José, su esposo, que era un hombre recto, no quiso denunciarla sino que determinó repudiarla en privado.

Mateo 1:19 Referencias Cruzadas

Génesis 38:24

Unos tres meses después le dijeron a Judá: “Tamar, tu nuera ha tenido relaciones sexuales como una prostituta y ahora está embarazada”. “¡Sáquenla y quémenla hasta la muerte!” ordenó Judá.

Génesis 6:9

Esta es la historia de Noé y su familia. Noé era un hombre íntegro, que vivía una vida con principios morales entre las personas de su época. Él tenía una relación estrecha con Dios.

Levítico 19:20

“Si un hombre tiene relaciones sexuales con una sirvienta a la que se le ha prometido ser la esposa de otro hombre, pero que aún no ha sido comprada o liberada, entonces se debe pagar una compensación. Sin embargo, no deben ser asesinados, porque ella no ha sido liberada.

Levítico 20:10

“Cualquier hombre que cometa adulterio con la esposa de otro debe ser ejecutado, así como la mujer.

Marcos 10:4

“Moisés permitía que un hombre escribiera un certificado de divorcio y desechara a la esposa”, respondieron ellos.

Marcos 6:20

porque Herodes sabía que Juan era un hombre santo que hacía lo recto. Herodes protegía a Juan y, aunque lo que Juan le decía lo inquietaba, aun así Herodes se complacía en escuchar lo que él decía.

Lucas 2:25

En ese tiempo vivía en Jerusalén un hombre llamado Simeón. Y era un hombre recto y muy piadoso. Él esperaba con ansias la esperanza de Israel, y el Espíritu Santo estaba sobre él.

Hechos 10:22

“Venimos de parte de Cornelio, un hombre bueno, devoto, que tiene temor de Dios y es respetado entre el pueblo judío”, respondieron. “Un ángel lo instruyó para que enviara a buscarte y llevarte hasta su casa para escuchar lo que tú tienes para decirle”.

Hechos 27:39

Cuando llegó la mañana no reconocieron la costa, pero vieron una bahía que tenía playa. Entonces hicieron el plan para tratar de encallar el barco allí.

2 Corintios 1:15

Como yo estaba tan seguro de su confianza en mí, hice planes para venir a visitarlos primero. Así ustedes se habrían beneficiado doblemente,

Deuteronomio 22:20

Pero si la acusación es cierta y no hay pruebas de la virginidad de la mujer,