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Ester 8:6 - Versión Biblia Libre

6 ¿Cómo podré soportar ver el desastre que está a punto de caer sobre mi pueblo? ¿Cómo podré soportar ver la destrucción de mi familia?”

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Más versiones

Biblia Reina Valera 1960

6 Porque ¿cómo podré yo ver el mal que alcanzará a mi pueblo? ¿Cómo podré yo ver la destrucción de mi nación?

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Biblia Nueva Traducción Viviente

6 Pues, ¿cómo podría soportar ver a mi pueblo y a mi familia ser masacrados y destruidos?

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Biblia Católica (Latinoamericana)

6 ¿Cómo podría yo presenciar la desgracia que va a caer sobre mi pueblo? ¿Cómo podría presenciar la destrucción de mi raza?»

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La Biblia Textual 3a Edicion

6 Porque, ¿cómo podré yo ver el mal que alcanzará a mi pueblo? ¿Y cómo podré contemplar la destrucción de mi parentela?

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

6 Porque, ¿cómo podré yo contemplar la desgracia que va a caer sobre mi pueblo? ¿Cómo podré yo ver el exterminio de mi raza?'.

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Ester 8:6
9 Referencias Cruzadas  

Porque, ¿cómo podría volver a mi padre si el niño no estuviera conmigo? No podría soportar ver la angustia que causaría a mi padre”.


pero le respondí al rey: “¡Viva el rey! ¿Cómo puedo evitar estar triste? La ciudad donde están enterrados mis antepasados está en ruinas, y sus puertas han sido incendiadas”.


Porque mi pueblo y yo hemos sido vendidos para ser destruidos, asesinados y aniquilados. Si sólo hubiéramos sido vendidos como esclavos, me habría callado, porque nuestro sufrimiento no habría justificado molestar al rey”.


El decimotercer día del duodécimo mes, el mes de Adar, debía cumplirse la orden y el decreto del rey. Ese día los enemigos de los judíos pensaron que los aplastarían, pero sucedió exactamente lo contrario: los judíos aplastaron a sus enemigos.


“Estoy en agonía, ¡en absoluta agonía! ¡Mi corazón se está rompiendo! ¡Late salvajemente en mi pecho! Mi corazón late dentro de mí; no puedo callar porque he oído la trompeta, la señal de batalla.


Cómo quisiera que mi cabeza fuera un manantial de agua, y mis ojos una fuente de lágrimas. Entonces lloraría día y noche por todo mi pueblo que ha sido asesinado.


Mis hermanos y hermanas, el deseo de mi corazón—mi oración a Dios—es la salvación del pueblo de Israel.


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