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Esdras 7:26 - Versión Biblia Libre

26 Cualquiera que no cumpla la ley de tu Dios y la ley del rey, será castigado severamente, ya sea con la muerte, el destierro, la confiscación de bienes o la prisión”.

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Más versiones

Biblia Reina Valera 1960

26 Y cualquiera que no cumpliere la ley de tu Dios, y la ley del rey, sea juzgado prontamente, sea a muerte, a destierro, a pena de multa, o prisión.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

26 Cualquiera que se niegue a obedecer la ley de tu Dios y la ley del rey será castigado de inmediato, ya sea por muerte, destierro, confiscación de bienes o encarcelamiento».

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Biblia Católica (Latinoamericana)

26 Si alguien no cumple la ley de tu Dios y la ley del rey, será acusado ante la justicia y condenado a multa, a prisión, a exilio o a la muerte'.

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La Biblia Textual 3a Edicion

26 Y todo el que no cumpla la Ley de tu Dios, y la ley del rey, le sea ejecutado juicio con toda diligencia, ya sea para muerte, para destierro, para confiscación de bienes, o para prisión.

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

26 Y a todo aquel que no cumpla la ley de tu Dios y la ley del rey, aplíquesele rigurosa justicia: muerte, destierro, multa o prisión'.

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Esdras 7:26
12 Referencias Cruzadas  

En ese momento el poder de Dios ayudaba a que el pueblo de Judá tuviera todos el mismo deseo de seguir las órdenes del rey y de sus funcionarios, tal como lo indicaba la palabra del Señor.


¡Haz algo! Porque es tu responsabilidad. Estamos contigo. Sé valiente y hazlo”.


Al que no viniera en el plazo de tres días se le confiscarían todos sus bienes y se le prohibiría participar en la asamblea de los exiliados. Esta fue la decisión de los líderes y de los ancianos.


Además, declaro que si alguien interfiere con este decreto, se arrancará una viga de su casa y se clavará en el suelo, y él será empalado en ella. Su propia casa se convertirá en un montón de escombros por desobedecer este decreto.


Que Dios, que eligió la ciudad de Jerusalén como el lugar donde sería honrado, destruya a cualquier rey o pueblo que intente alterar lo que he dicho o que destruya este Templo. Yo, Darío, emito este decreto. Que se cumpla fielmente”.


Pero Dios los derribará con tanta fuerza que nunca más se podrán levantar. Dios los agarrará y los sacará de su tienda. Los expulsará de la tierra de los vivos. Selah.


Yo decreto que en todo mi reino todos deben respetar y honrar al Dios de Daniel, porque él es el Dios vivo. Él es eterno y su reino nunca será destruido. Su reino no tendrá fin.


“¡Maldito sea el que no obedezca cuidadosamente todas estas leyes al cumplirlas!” Todos dicen: “¡Amén!”


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