Biblia Todo Logo
La Biblia Online

- Anuncios -





1 Samuel 25:31 - Versión Biblia Libre

31 no tendrás sentimientos de remordimiento ni conciencia culpable por el derramamiento innecesario de sangre ni por tomar tu propia venganza. Y cuando el Señor haya hecho estas cosas buenas por ti, señor, por favor acuérdate de mí, tu sierva”.

Ver Capítulo Copiar


Más versiones

Biblia Reina Valera 1960

31 entonces, señor mío, no tendrás motivo de pena ni remordimientos por haber derramado sangre sin causa, o por haberte vengado por ti mismo. Guárdese, pues, mi señor, y cuando Jehová haga bien a mi señor, acuérdate de tu sierva.

Ver Capítulo Copiar

Biblia Nueva Traducción Viviente

31 que esta no sea una sombra en su historial. Entonces su conciencia no tendrá que llevar la pesada carga de derramamiento de sangre y venganza innecesarios. Y cuando el Señor haya hecho estas grandes cosas para usted, por favor, ¡acuérdese de mí, su sierva!

Ver Capítulo Copiar

Biblia Católica (Latinoamericana)

31 tú no podrás sentir remordimiento de haber derramado sangre sin motivo y de haberte hecho justicia por ti mismo. ¡Cuando Yavé colme a mi señor, acuérdese de su sierva!'

Ver Capítulo Copiar

La Biblia Textual 3a Edicion

31 esto° no causará pesar ni remordimiento a mi señor, ya por haber derramado sangre sin causa, o que mi señor se haya vengado por sí mismo. Y cuando YHVH favorezca a mi señor, acuérdate de tu sierva.

Ver Capítulo Copiar

Biblia Serafín de Ausejo 1975

31 que no sirva para ti, mi señor, de turbación ni de remordimiento de corazón el haber derramado sangre sin causa y el haberse vengado mi señor por sí mismo. Y cuando Yahveh haya colmado de beneficios a mi señor, acuérdate de tu sierva'.

Ver Capítulo Copiar




1 Samuel 25:31
13 Referencias Cruzadas  

Pero cuando las cosas te vayan bien, por favor, acuérdate de mi y habla con el Faraón en mi nombre, y por favor sácame de esta prisión.


Dios me vindica, pone a los pueblos bajo mis pies,


¡El Señor es un Dios de venganza! Dios de venganza, ¡manifiéstate!


Entonces dijo: “Jesús, por favor, acuérdate de mí cuando entres a tu reino”.


Queridos amigos, no procuren la venganza, más bien dejen que Dios sea quien haga juicio—tal como señala la Escritura: “‘Es a mí a quien corresponde administrar la justicia, yo pagaré,’ dice el Señor”.


Es mejor no comer carne, o no beber vino ni nada que pueda ser causa del tropiezo de tu hermano creyente.


Nos enorgullecemos en el hecho—y nuestra conciencia lo confirma—de que hemos actuado de manera apropiada con las personas, especialmente con ustedes. Hemos seguido los principios de Dios de santidad y sinceridad, no conforme a la sabiduría mundanal, sino por la gracia de Dios.


Que el Señor decida y elija entre tú y yo. Que preste atención a mi caso y lo apoye; que me salve de ti”.


Así que cuando el Señor haya hecho por ti, señor, todo el bien que te prometió, y te haya hecho gobernar sobre Israel,


Que seas recompensada por tus sabias decisiones, por haber evitado que hoy derramara sangre y me vengara.


Cuando los hombres de David llegaron al Carmelo, le dijeron a Abigail: “David nos ha enviado a traerte para que seas su esposa”.


El Señor recompensa a todos los que hacen lo correcto y son fieles. El Señor me ha entregado hoy a ti, pero me he negado a dañar al ungido del Señor.


Síguenos en:

Anuncios


Anuncios


¡Síguenos en WhatsApp! Síguenos