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Lucas 10:7 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008

7 Quédense en la misma casa, coman y beban lo que allí les den, porque el trabajador tiene derecho a su salario. No anden de casa en casa.

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Más versiones

Biblia Reina Valera 1960

7 Y posad en aquella misma casa, comiendo y bebiendo lo que os den; porque el obrero es digno de su salario. No os paséis de casa en casa.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

7 No cambien de una casa a otra. Quédense en un lugar, coman y beban lo que les den. No duden en aceptar la hospitalidad, porque los que trabajan merecen recibir su salario.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

7 Mientras se queden en esa casa, coman y beban lo que les ofrezcan, porque el obrero merece su salario.

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La Biblia Textual 3a Edicion

7 Y posad en aquella misma casa, comiendo y bebiendo lo que sea de parte de ellos, porque el obrero es digno de su salario.° No andéis de casa en casa.

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

7 Permaneced, pues, en aquella casa, comiendo y bebiendo de lo que tengan; porque el obrero tiene derecho a su salario. Y no os mudéis de una casa a otra.

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Lucas 10:7
18 Referencias Cruzadas  

Aarón, sus hijos y sus familias podrán comerlo en sus hogares o dondequiera que ellos deseen hacerlo, porque es la compensación por su servicio en el santuario.


«Cuando entren a una casa —les dijo—, quédense allí hasta que se vayan de ese lugar.


Si hay allí alguien digno de paz, la recibirá; pero si no, la bendición no se cumplirá.


En la casa a la que lleguen, quédense hasta que salgan de ese pueblo.


Entonces la bautizamos junto con los demás miembros de su familia. ―Si ustedes creen que soy fiel al Señor —nos dijo ella—, vengan a hospedarse a mi casa. Su insistencia fue tal que aceptamos.


Después prepararon un banquete y el carcelero rebosaba de gozo, al igual que sus familiares, porque ya todos creían en Dios.


Pablo y Silas entonces regresaron a casa de Lidia y allí volvieron a reunirse con los creyentes para consolarlos una vez más antes de partir.


Los que estudian la Palabra de Dios deben ayudar económicamente a sus maestros.


Allí te regocijarás delante del Señor con tus hijos e hijas y siervos. Además, recuerda siempre de invitar a los levitas para que hagan fiesta contigo, porque ellos no tienen tierra propia.


Tendrá participación de los sacrificios y ofrendas por derecho propio, no como ayuda en caso de necesidad.


Además, se acostumbran a estar ociosas y andar de casa en casa y se vuelven perezosas, chismosas y entrometidas, hablando de lo que no deben.


También el agricultor: trabaja duro para recibir primero parte de la cosecha.


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