Levítico 8:9 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008

⁹ Luego colocó la mitra en la cabeza de Aarón, y sobre la mitra puso la lámina de oro, la diadema santa, tal como Dios se lo había ordenado.

Más versiones

Biblia Reina Valera 1960

⁹ Después puso la mitra sobre su cabeza, y sobre la mitra, en frente, puso la lámina de oro, la diadema santa, como Jehová había mandado a Moisés.

Biblia Nueva Traducción Viviente

⁹ Además puso el turbante sobre la cabeza de Aarón y, en la parte delantera del turbante, sujetó la medalla de oro —el símbolo de santidad— tal como el Señor le había ordenado.

Biblia Católica (Latinoamericana)

⁹ Le colocó también el turbante en la cabeza, y puso en su parte delantera la lámina de oro: ésta era la corona de santidad que Yavé había mandado a Moisés.

La Biblia Textual 3a Edicion

⁹ Luego le puso el turbante sobre la cabeza, y encima del turbante, en su frontal, fijó la placa de oro, la diadema sagrada, tal como YHVH había ordenado a Moisés.

Biblia Serafín de Ausejo 1975

⁹ Le puso en la cabeza la tiara, en cuya parte delantera colocó la lámina de oro, la diadema sagrada, como había ordenado Yahveh a Moisés.

Levítico 8:9 Referencias Cruzadas

Éxodo 28:4

Estas son las vestiduras que harán: un pectoral, un efod, un manto, una túnica bordada, una mitra y un cinturón. También harán vestiduras especiales para los hijos de Aarón.

Éxodo 29:6

y le pondrás en la cabeza la mitra con la lámina de oro.

Éxodo 40:16

Moisés comenzó a hacer todo lo que el Señor le había ordenado.

Levítico 8:21

A continuación lavó los intestinos y las extremidades en agua y los quemó sobre el altar, de modo que todo el carnero se consumió delante del Señor. Fue una ofrenda quemada de muy grato olor al Señor, por cuanto Moisés había seguido en forma estricta las órdenes que él le había dado.

Levítico 8:36

De esta manera cumplieron Aarón y sus hijos todo lo que el Señor le había ordenado a Moisés.

Zacarías 3:5

Entonces ordenó: «Pónganle también una mitra en la cabeza, como señal de dignidad». Y ellos se la pusieron, y le pusieron también las ropas de dignatario.