Biblia Todo Logo
La Biblia Online
- Anuncios -





2 Juan 1:5 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008

5 Y ahora, amados hermanos, les ruego que nos amemos unos a otros. Este mandamiento no es nuevo, es el mandamiento que Dios nos dio desde un principio.

Ver Capítulo Copiar


Más versiones

Biblia Reina Valera 1960

5 Y ahora te ruego, señora, no como escribiéndote un nuevo mandamiento, sino el que hemos tenido desde el principio, que nos amemos unos a otros.

Ver Capítulo Copiar

Biblia Nueva Traducción Viviente

5 Les escribo para recordarles, queridos amigos, que nos amemos unos a otros. Este mandamiento no es nuevo, sino que lo hemos tenido desde el principio.

Ver Capítulo Copiar

Biblia Católica (Latinoamericana)

5 Y ahora te ruego, señora -aunque no te escribo un mandamiento nuevo, sino el que tenemos desde el comienzo-, que nos amemos unos a otros.

Ver Capítulo Copiar

La Biblia Textual 3a Edicion

5 Y ahora te ruego, oh señora, no como escribiéndote un mandamiento nuevo, sino el que teníamos desde un principio: que nos amemos unos a otros.°

Ver Capítulo Copiar

Biblia Serafín de Ausejo 1975

5 Y ahora te ruego, señora, no como quien escribe un mandamiento nuevo, sino el que teníamos desde el principio: que nos amemos unos a otros.

Ver Capítulo Copiar




2 Juan 1:5
17 Referencias Cruzadas  

Y mi mandamiento es este: que se amen unos a otros como yo los amo.


Esto es lo que les mando: que se amen unos a otros.


En cambio, este es el fruto que el Espíritu produce en nosotros: amor, gozo, paz, paciencia, benignidad, bondad, fidelidad,


Y vivan amando a los demás, siguiendo el ejemplo de Cristo, que nos amó y se entregó por nosotros en sacrificio, como ofrenda de perfume agradable a Dios.


Con respecto al amor entre los hermanos, no hace falta que les escriba, porque Dios mismo les ha enseñado a amarse unos a otros.


No dejen de amarse unos a otros con amor de hermanos.


Sobre todo, ámense en gran manera unos a otros, porque el amor cubre muchos pecados.


a la devoción a Dios, el afecto fraternal; y al afecto fraternal, el amor.


Desde el principio se nos ha enseñado que debemos amarnos unos a otros.


Su mandamiento es que creamos en Jesucristo su Hijo y que nos amemos unos a otros, como lo mandó.


Si alguno dice: «Amo a Dios», pero aborrece a su hermano, es un mentiroso. Si no ama al hermano que tiene delante, ¿cómo puede amar a Dios, a quien jamás ha visto?


El anciano, a la comunidad que Dios ha elegido y a sus miembros: Los amo de veras, no sólo yo sino todos los que conocen la verdad.


Síguenos en:

Anuncios


Anuncios


¡Síguenos en WhatsApp! Síguenos