Biblia Todo Logo
La Biblia Online

- Anuncios -





Santiago 5:9 - Nueva Versión Internacional 2019 (simplificada - Nuevo Testamento)

9 Hermanos en la fe, no se quejen unos de otros, para que no sean castigados. ¡El Juez ya está a la puerta!

Ver Capítulo Copiar


Más versiones

Biblia Reina Valera 1960

9 Hermanos, no os quejéis unos contra otros, para que no seáis condenados; he aquí, el juez está delante de la puerta.

Ver Capítulo Copiar

Biblia Nueva Traducción Viviente

9 Hermanos, no se quejen unos de otros, o serán juzgados. ¡Pues miren, el Juez ya está a la puerta!

Ver Capítulo Copiar

Biblia Católica (Latinoamericana)

9 Hermanos: no se peleen unos con otros, y así no serán juzgados; miren que el juez está a la puerta.

Ver Capítulo Copiar

La Biblia Textual 3a Edicion

9 Hermanos, no os quejéis unos contra otros, para que no seáis juzgados.° Mirad, el Juez está a las puertas.

Ver Capítulo Copiar

Biblia Serafín de Ausejo 1975

9 No os quejéis, hermanos, unos de otros, para no ser juzgados. Mirad que el juez está ya a la puerta.

Ver Capítulo Copiar




Santiago 5:9
21 Referencias Cruzadas  

Igualmente, cuando vean todas estas cosas, sepan que el tiempo está cerca, a las puertas.


Igualmente, cuando vean que suceden estas cosas, sepan que el tiempo está cerca, a las puertas.


Por eso Herodías le guardaba rencor a Juan y deseaba matarlo. Pero no había logrado hacerlo,


Todo eso les sucedió para que nos sirviera de ejemplo. Esto quedó escrito para que nos sirviera de advertencia, pues estamos viviendo los tiempos finales.


Por lo tanto, no juzguen a nadie antes de tiempo. Esperen hasta que venga el Señor. Él sacará a la luz lo que está oculto en la oscuridad y pondrá al descubierto las intenciones de cada corazón. Entonces cada uno recibirá de Dios la alabanza que le corresponda.


Cada uno debe dar según lo que haya decidido en su corazón, no de mala gana ni por obligación. Dios ama al que da con alegría.


En efecto, toda la Ley se resume en un solo mandamiento: «Ama a tu prójimo como a ti mismo».


No dejemos que el orgullo nos domine provocando peleas y envidias entre nosotros.


Hermanos en la fe, no hablen mal unos de otros. Si alguien habla mal de su hermano, o lo critica, habla mal de la Ley y la critica. Y, si criticas la Ley, ya no estás obedeciéndola, sino que te conviertes en su juez.


Solo Dios es juez. Él nos dio las leyes y es quien decide si nos salva o nos destruye. Tú, en cambio, ¿quién eres para creerte juez de los demás?


Hermanos en la fe, tomen como ejemplo de sufrimiento y de paciencia a los profetas que hablaron en el nombre del Señor.


Por tanto, hermanos en la fe, tengan paciencia hasta la venida del Señor. Miren cómo espera el agricultor a que la tierra dé su precioso fruto. Por eso, con paciencia aguarda las lluvias de otoño y primavera.


Pero tendrán que rendir cuentas al que está preparado para juzgar a los vivos y a los muertos.


Practiquen la hospitalidad entre ustedes sin quejarse.


Mira que estoy a la puerta y llamo. Si alguno oye mi voz y abre la puerta, entraré y cenaré con él y él, conmigo.


Síguenos en:

Anuncios


Anuncios


¡Síguenos en WhatsApp! Síguenos