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Mateo 5:30 - Nueva Versión Internacional 2019 (simplificada - Nuevo Testamento)

30 Y, si tu mano derecha te hace pecar, córtatela y arrójala. Más te vale perder una sola parte de tu cuerpo y no que todo él vaya al infierno.

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Más versiones

Biblia Reina Valera 1960

30 Y si tu mano derecha te es ocasión de caer, córtala, y échala de ti; pues mejor te es que se pierda uno de tus miembros, y no que todo tu cuerpo sea echado al infierno.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

30 Y si tu mano —incluso tu mano más fuerte— te hace pecar, córtala y tírala. Es preferible que pierdas una parte del cuerpo y no que todo tu cuerpo sea arrojado al infierno.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

30 Y si tu mano derecha te lleva al pecado, córtala y aléjala de ti; porque es mejor que pierdas una parte de tu cuerpo y no que todo tu cuerpo sea arrojado al infierno.

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La Biblia Textual 3a Edicion

30 Y si tu mano derecha te es ocasión de caer, córtala y échala de ti; pues más te conviene que se pierda uno de tus miembros, y no que todo tu cuerpo se vaya al infierno.°

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

30 Y si tu mano derecha es para ti ocasión de pecado, córtatela y arrójala de ti; porque más te vale perder uno solo de tus miembros que ir todo tu cuerpo a la gehenna.

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Mateo 5:30
19 Referencias Cruzadas  

Dichoso el que, viendo lo que hago, no deja de seguirme.


Pero, como no tiene raíz, dura poco tiempo. Cuando surgen problemas o persecución a causa de la palabra, en seguida se aparta de ella.


Pero Jesús se dio vuelta y le dijo a Pedro: ―¡Aléjate de mí, Satanás! Quieres hacerme desobedecer; no piensas desde el punto de vista de Dios, sino del punto de vista humano.


Pero, para no ofender a esta gente, vete al lago y echa el anzuelo. Saca el primer pez que pique; ábrele la boca y encontrarás una moneda. Tómala y dásela a ellos por mi impuesto y por el tuyo.


Si tu mano o tu pie te hace pecar, córtatelo y arrójalo. Más te vale entrar en la vida manco o cojo que ser echado al fuego eterno con tus dos manos y tus dos pies.


Entonces el rey dijo a los sirvientes: “Átenlo de pies y manos, y échenlo afuera, a la oscuridad, donde habrá llanto y mucho sufrimiento”.


El que había recibido las cinco mil monedas llegó con las otras cinco mil. “Señor —dijo—, usted me encargó cinco mil monedas. Mire, he ganado otras cinco mil”.


―Esta misma noche —les dijo Jesús— todos ustedes me abandonarán, porque las Escrituras dicen: »“Heriré al pastor, y se dispersarán las ovejas del rebaño”.


Pero yo les digo que todo el que se enoje con su hermano será llevado a juicio. Es más, cualquiera que insulte a su hermano será llevado ante el tribunal. Y cualquiera que lo maldiga será llevado al fuego del infierno.


Por tanto, si tu ojo derecho te hace pecar, sácatelo y tíralo. Más te vale perder una sola parte de tu cuerpo y no que todo él sea echado al infierno.


Y, si tu mano te hace pecar, córtatela. Más te vale entrar en la vida manco que ir con las dos manos al infierno, donde el fuego nunca se apaga.


Les voy a enseñar más bien a quién deben temer: tengan miedo del que, después de dar muerte, tiene poder para echarlos al infierno. Sí, les aseguro que a él deben tenerle miedo.


Así que, si haces pecar a uno solo de estos pequeños, más te valdría ser echado al mar con una gran piedra de molino atada al cuello.


Como dicen las Escrituras: «Miren que pongo en Sion una piedra que hace tropezar y una roca que hace caer; pero el que confíe en ella no será avergonzado».


Por lo tanto, si lo que como ocasiona la caída de mi hermano en la fe, no comeré carne jamás, para no hacerlo caer en pecado.


Hermanos en la fe, si fuera verdad que yo todavía enseño que la circuncisión es necesaria, mis enemigos dejarían de molestarme. Si eso fuera lo que yo predico, el mensaje de la muerte de Cristo en la cruz no los ofendería tanto.


Y también: «una piedra que hace tropezar y una roca que hace caer». Es decir, esa gente no aceptará el mensaje de Cristo, y por eso serán castigados. Así lo decidió Dios desde antes.


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