Marcos 13:23 - Nueva Versión Internacional 2019 (simplificada - Nuevo Testamento)

²³ Así que tengan cuidado; se lo he dicho a ustedes de antemano.

Más versiones

Biblia Reina Valera 1960

²³ Mas vosotros mirad; os lo he dicho todo antes.

Biblia Nueva Traducción Viviente

²³ ¡Tengan cuidado! ¡Les he advertido esto de antemano!

Biblia Católica (Latinoamericana)

²³ Estén alerta, yo se lo he advertido todo.

La Biblia Textual 3a Edicion

²³ Pero vosotros, estad alerta. Os lo he predicho todo.

Biblia Serafín de Ausejo 1975

²³ Pero vosotros estad sobre aviso; de antemano os lo he dicho todo.

Marcos 13:23 Referencias Cruzadas

Mateo 24:25

Fíjense que se lo he dicho a ustedes de antemano.

Mateo 7:15

»Cuídense de los falsos profetas. Vienen a ustedes disfrazados de ovejas, pero por dentro son lobos feroces.

Marcos 13:22

porque surgirán falsos Cristos y falsos profetas. Y harán maravillas y milagros para engañar, de ser posible, aun a los elegidos.

Marcos 13:24

»Pero en aquellos días, después de ese tiempo de sufrimiento, »“se oscurecerá el sol y no brillará más la luna.

Marcos 13:33

¡Estén alerta! Manténganse despiertos porque ustedes no saben cuándo llegará ese tiempo.

Marcos 13:5

―Tengan cuidado de que nadie los engañe —comenzó Jesús a decirles—.

Marcos 13:9

»Pero ustedes cuídense. Los entregarán a los tribunales y los azotarán en las sinagogas. Por mi causa comparecerán ante gobernadores y reyes para dar testimonio ante ellos.

Lucas 21:34

»Tengan cuidado, no sea que se les endurezca el corazón por el vicio, la borrachera y las preocupaciones de esta vida. Si no tienen cuidado, aquel día caerá de repente sobre ustedes.

Lucas 21:8

―Tengan cuidado; no se dejen engañar —les dijo Jesús—. Vendrán muchos que, usando mi nombre, dirán: “Yo soy el Cristo”, y dirán: “El tiempo está cerca”. No los sigan ustedes.

Juan 14:29

Y les he dicho esto ahora, antes de que ocurra, para que, cuando suceda, crean.

2 Pedro 3:17

Así que ustedes, queridos hermanos en la fe, ya saben todo esto. Por eso, manténganse alerta, no sea que, arrastrados por el error de esos malvados, pierdan la confianza en Dios y dejen de creer.