Biblia Todo Logo
La Biblia Online
- Anuncios -





Juan 14:10 - Nueva Versión Internacional 2019 (simplificada - Nuevo Testamento)

10 ¿Acaso no crees que yo estoy en el Padre y que el Padre está en mí? Las palabras que yo les hablo, no las hablo como cosa mía. El Padre, que está en mí, es el que hace sus obras.

Ver Capítulo Copiar


Más versiones

Biblia Reina Valera 1960

10 ¿No crees que yo soy en el Padre, y el Padre en mí? Las palabras que yo os hablo, no las hablo por mi propia cuenta, sino que el Padre que mora en mí, él hace las obras.

Ver Capítulo Copiar

Biblia Nueva Traducción Viviente

10 ¿Acaso no crees que yo estoy en el Padre y el Padre está en mí? Las palabras que yo digo no son mías, sino que mi Padre, quien vive en mí, hace su obra por medio de mí.

Ver Capítulo Copiar

Biblia Católica (Latinoamericana)

10 ¿No crees que yo estoy en el Padre y que el Padre está en mí? Cuando les enseño, esto no viene de mí, sino que el Padre, que permanece en mí, hace sus propias obras.

Ver Capítulo Copiar

La Biblia Textual 3a Edicion

10 ¿No crees que Yo estoy en el Padre, y el Padre en mí? Las palabras que Yo os digo, no las hablo por mi propia cuenta; sino el Padre que mora en mí, hace sus obras.

Ver Capítulo Copiar

Biblia Serafín de Ausejo 1975

10 ¿No crees que yo estoy en el Padre y que el Padre está en mí? Las palabras que yo os digo, no las digo por mi cuenta; el Padre que mora en mí es quien realiza sus obras.

Ver Capítulo Copiar




Juan 14:10
26 Referencias Cruzadas  

Pero, si las hago, aunque no me crean a mí, crean a mis obras. Así sabrán y entenderán que el Padre está en mí y que yo estoy en el Padre.


Y todo el que vive y cree en mí no morirá jamás. ¿Crees esto?


Yo no he hablado por mi propia cuenta. El Padre que me envió me ordenó qué decir y cómo decirlo.


Créanme cuando les digo que yo estoy en el Padre y que el Padre está en mí. Si no, al menos créanme por las obras mismas.


En aquel día ustedes sabrán que yo estoy en mi Padre, y ustedes en mí, y yo en ustedes.


El que no me ama no obedece mis palabras. Pero estas palabras que ustedes oyen no son mías, sino del Padre, que me envió.


Les he entregado las palabras que me diste, y ellos las aceptaron. Saben con certeza que salí de ti y han creído que tú me enviaste.


Este fue de noche a visitar a Jesús. ―Maestro —le dijo—, sabemos que has venido de parte de Dios. Pues nadie podría hacer las señales milagrosas que tú haces si Dios no estuviera con él.


Pero Jesús les respondía: ―Mi Padre aún hoy está trabajando, y yo también trabajo.


Entonces Jesús afirmó: ―Les aseguro que el Hijo no puede hacer nada por su propia cuenta, sino solamente lo que ve que su Padre hace. Todo lo que hace el Padre, lo hace también el Hijo.


―Mi enseñanza no es mía —respondió Jesús—, sino del que me envió.


Por eso Jesús añadió: ―Cuando hayan levantado al Hijo del hombre, sabrán ustedes que yo soy quien afirmo ser. Y sabrán que no hago nada por mi propia cuenta, sino que hablo conforme a lo que el Padre me ha enseñado.


Yo hablo de lo que he visto en presencia del Padre. Así también ustedes, hagan lo que del Padre han escuchado.


Ustedes, en cambio, quieren matarme a mí, que les he dicho la verdad que he recibido de parte de Dios. ¡Abraham jamás haría tal cosa!


Me refiero a Jesús de Nazaret. Dios lo llenó de poder y del Espíritu Santo. Él anduvo haciendo el bien y sanando a los oprimidos por el diablo, porque Dios estaba con él.


Un mensaje que le dice al mundo que Dios envió a Cristo para reconciliarnos con él. Nuestros pecados fueron perdonados, y se nos encargó la predicación de este mensaje de reconciliación.


Dios quiso poner en él todo su poder,


En Cristo está presente todo el poder de Dios.


Tres cosas son las que dicen que esto es cierto,


Síguenos en:

Anuncios


Anuncios


¡Síguenos en WhatsApp! Síguenos