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Colosenses 1:13 - Nueva Versión Internacional 2019 (simplificada - Nuevo Testamento)

13 Él nos libró del oscuro poder de Satanás y nos trasladó al reino de su amado Hijo.

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Más versiones

Biblia Reina Valera 1960

13 el cual nos ha librado de la potestad de las tinieblas, y trasladado al reino de su amado Hijo,

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Biblia Nueva Traducción Viviente

13 Pues él nos rescató del reino de la oscuridad y nos trasladó al reino de su Hijo amado,

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Biblia Católica (Latinoamericana)

13 El nos arrancó del poder de las tinieblas y nos trasladó al Reino de su Hijo amado.

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La Biblia Textual 3a Edicion

13 quien nos rescató de la potestad de las tinieblas, y nos trasladó al reino del Hijo de su amor,

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

13 Él nos libertó del poder de las tinieblas y nos trasladó al reino del Hijo de su amor,

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Colosenses 1:13
40 Referencias Cruzadas  

Mientras estaba aún hablando, apareció una nube luminosa que los envolvió, de la cual salió una voz que dijo: «Este es mi Hijo amado; estoy muy contento con él. ¡Escúchenlo!».


»Entonces dirá el Rey a los que estén a su derecha: “Vengan ustedes, a quienes mi Padre ha bendecido; reciban su herencia, el reino preparado para ustedes desde la creación del mundo.


Y una voz del cielo decía: «Este es mi Hijo amado; estoy muy contento con él».


―Esfuércense por entrar por la puerta estrecha —contestó—, porque les digo que muchos tratarán de entrar y no podrán.


Todos los días estaba con ustedes en el Templo, y no se atrevieron a ponerme las manos encima. Pero ya ha llegado la hora de ustedes, cuando reinan las tinieblas.


»Padre, quiero que los que me has dado estén conmigo donde yo estoy. Que vean la gloria que me diste porque me has amado desde antes de la creación del mundo.


El Padre ama al Hijo y ha puesto todo en sus manos.


»Les aseguro que el que oye mi palabra y cree al que me envió tiene vida eterna. No será juzgado, sino que ha pasado de la muerte a la vida.


para que les hables. Así abrirán los ojos y verán lo malo que hacen. Será como si pasaran de la oscuridad a la luz y del poder de Satanás al poder de Dios. De ese modo, al creer en mí, recibirán el perdón de los pecados y serán parte del pueblo de Dios”.


Pues el reino de Dios no es cuestión de comidas o bebidas. Más bien tiene que ver con dejarse guiar por el Espíritu Santo a una vida de justicia, paz y alegría.


Y no es de extrañar, ya que Satanás mismo se disfraza de ángel de luz.


El dios de este mundo ha impedido que los que no creen entiendan esto. Lo hace para que no entiendan cuán maravilloso es el mensaje de Cristo, quien nos muestra cómo es Dios.


y para que alabáramos su inmerecido y glorioso amor por nosotros. Amor que nos mostró por medio de su amado Hijo.


Tienen una mente que no los deja pensar con claridad. Además rechazan la vida que Dios ofrece, pues son ignorantes y tercos.


Pues pueden estar seguros de que si tienen relaciones sexuales prohibidas o hacen cosas vergonzosas jamás formarán parte del reino de Cristo y de Dios. Tampoco lo serán aquellos que siempre están preocupados por tener más y más. Los que así se comportan adoran a un dios falso.


Pues ustedes antes eran como gente viviendo en oscuridad, pero gracias al Señor ahora viven en la luz. Pórtense entonces como personas que caminan en la luz.


Porque nuestra lucha no es contra gente de esta tierra, sino contra fuerzas espirituales malignas que actúan en el reino espiritual. Luchamos contra gobernantes, autoridades y poderes que no son de este mundo y tienen dominio sobre las tinieblas.


Los hemos animado y consolado. Además, les hemos llamado la atención para que vivan como a Dios le agrada, porque él los ha llamado a ser parte de su reino y de su gloria.


Por tanto, ya que ellos son de carne y hueso, Cristo también compartió esa naturaleza humana. Lo hizo para eliminar, mediante la muerte, al que tiene el dominio de la muerte —es decir, al diablo—.


Pero ustedes son una familia elegida por Dios, son sacerdotes al servicio del Rey, son su pueblo elegido, pues le pertenecen a él. Dios los eligió para que anunciaran las cosas maravillosas que él ha hecho por ustedes. Él los llamó para que dejaran el pecado y la maldad. Fue como sacarlos de las tinieblas a su luz admirable.


Además, se les dará una gran bienvenida en el reino eterno de nuestro Señor y Salvador Jesucristo.


Sin embargo, esto que les escribo es un mandamiento nuevo. Y la verdad que transmite este nuevo mandamiento se puede ver tanto en la vida de Cristo como en la de ustedes. Todos la pueden ver porque la oscuridad ya va desapareciendo y ahora brilla la luz verdadera.


Nosotros sabemos que hemos pasado de la muerte a la vida porque amamos a nuestros hermanos en la fe. El que no ama sigue controlado por el reino de la muerte.


El que vive pecando pertenece al diablo, porque el diablo ha estado pecando desde el principio. El Hijo de Dios fue enviado precisamente para destruir lo que hace el diablo.


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