Biblia Todo Logo
La Biblia Online

- Anuncios -





Apocalipsis 21:12 - Nueva Versión Internacional 2019 (simplificada - Nuevo Testamento)

12 Tenía una muralla grande y alta, y doce puertas. En cada puerta había un ángel, y en cada una estaban escritos los nombres de las doce tribus de Israel.

Ver Capítulo Copiar


Más versiones

Biblia Reina Valera 1960

12 Tenía un muro grande y alto con doce puertas; y en las puertas, doce ángeles, y nombres inscritos, que son los de las doce tribus de los hijos de Israel;

Ver Capítulo Copiar

Biblia Nueva Traducción Viviente

12 La muralla de la ciudad era alta y ancha, y tenía doce puertas vigiladas por doce ángeles. Los nombres de las doce tribus de Israel estaban escritos en las puertas.

Ver Capítulo Copiar

Biblia Católica (Latinoamericana)

12 Tenía una muralla grande y alta con doce puertas, y sobre las puertas doce ángeles y nombres grabados, que son los nombres de las doce tribus de los hijos de Israel.

Ver Capítulo Copiar

La Biblia Textual 3a Edicion

12 Tiene un muro grande y alto, el cual tiene doce puertas, y sobre las puertas, doce ángeles, y unos nombres inscritos,° que son de las doce tribus de los hijos de Israel.

Ver Capítulo Copiar

Biblia Serafín de Ausejo 1975

12 Tenía una muralla grande y elevada, en la que había doce puertas. Sobre las puertas había doce ángeles y nombres escritos encima, que son los de las doce tribus de los hijos de Israel.

Ver Capítulo Copiar




Apocalipsis 21:12
21 Referencias Cruzadas  

Sus puertas nunca se cerrarán, pues no habrá noche, siempre será de día.


Esta es la promesa que nuestras doce tribus esperan que se cumpla. Por eso adoran a Dios día y noche con mucho cuidado. Yo creo en esa promesa, oh rey, y de eso me acusan los judíos.


Pues todos los ángeles son solo espíritus que sirven a Dios. Él los envía para ayudar a los que han de ser salvos.


»Resulta que murió el mendigo, y los ángeles se lo llevaron para que estuviera al lado de Abraham. También murió el rico, y lo enterraron.


Les digo que así mismo se alegran los ángeles de Dios por un pecador que se arrepiente.


»Miren que no menosprecien a uno de estos pequeños. Pues les digo que en el cielo los ángeles de ellos contemplan siempre el rostro de mi Padre celestial.


Tres puertas daban al este, tres al norte, tres al sur y tres al oeste.


El ángel que hablaba conmigo llevaba una caña de oro para medir la ciudad, sus puertas y su muralla.


»Dichosos los que dejan de vivir en pecado, pues tendrán derecho al árbol de la vida. Ellos podrán entrar por las puertas de la ciudad.


Síguenos en:

Anuncios


Anuncios