Juan 5:39 - Biblia Nueva Versión Internacional 2022

³⁹ Ustedes estudian con diligencia las Escrituras porque piensan que en ellas hallan la vida eterna. ¡Y son ellas las que dan testimonio en mi favor!

Más versiones

Biblia Reina Valera 1960

³⁹ Escudriñad las Escrituras; porque a vosotros os parece que en ellas tenéis la vida eterna; y ellas son las que dan testimonio de mí;

Biblia Nueva Traducción Viviente

³⁹ »Ustedes estudian las Escrituras a fondo porque piensan que ellas les dan vida eterna. ¡Pero las Escrituras me señalan a mí!

Biblia Católica (Latinoamericana)

³⁹ Ustedes escudriñan las Escrituras pensando que encontrarán en ellas la vida eterna, y justamente ellas dan testimonio de mí.

La Biblia Textual 3a Edicion

³⁹ Escudriñáis° las Escrituras, porque os parece que en ellas tenéis vida eterna, y ellas son las que dan testimonio de mí.

Biblia Serafín de Ausejo 1975

³⁹ Vosotros investigáis las Escrituras, porque en ellas pensáis tener vida eterna. Pues son ellas, precisamente, las que dan testimonio de mí.

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

³⁹ Escudriñad las Escrituras; porque a vosotros os parece que en ellas tenéis la vida eterna; y ellas son las que dan testimonio de mí.

Juan 5:39 Referencias Cruzadas

Salmos 1:2

sino que en la Ley del Señor se deleita y día y noche medita en ella.

Salmos 119:11

En mi corazón atesoro tus dichos para no pecar contra ti.

Salmos 133:3

Es como el rocío de Hermón que va descendiendo sobre los montes de Sión. Ciertamente allí el Señor envía su bendición, vida para siempre.

Salmos 16:11

Me has dado a conocer el camino de la vida; me llenarás de alegría en tu presencia y de dicha eterna a tu derecha.

Salmos 21:4

Te pidió vida y se la concediste. Le diste una vida larga y duradera.

Salmos 36:9

Porque en ti está la fuente de la vida y en tu luz podemos ver la luz.

Proverbios 6:23

El mandamiento es una lámpara, la enseñanza es una luz y la disciplina es el camino a la vida.

Isaías 34:16

Consulten el libro del Señor y lean: Ninguno de estos animales faltará; cada cual tendrá su pareja. El Señor mismo ha dado la orden y su Espíritu los ha de reunir.

Isaías 8:20

yo les digo: «¡Aténganse a la Ley y al testimonio!». Para quienes no se atengan a esto no habrá un amanecer.

Jeremías 8:9

Los sabios serán avergonzados, serán atrapados y abatidos. Si han rechazado la palabra del Señor, ¿qué sabiduría pueden tener?

Daniel 12:2

Del polvo de la tierra se levantarán las multitudes de los que duermen, algunos de ellos para vida eterna; pero otros para quedar en la vergüenza y el desprecio eternos.

Mateo 22:29

Jesús contestó: —Ustedes andan equivocados porque desconocen las Escrituras y el poder de Dios.

Marcos 10:3

—¿Qué les mandó Moisés? —respondió Jesús.

Marcos 12:10

¿No han leído ustedes esta Escritura: »“La piedra que desecharon los constructores ha llegado a ser la piedra angular.

Lucas 16:29

Pero Abraham contestó: “Ya tienen a Moisés y a los Profetas; ¡que les hagan caso a ellos!”.

Lucas 16:31

Abraham le dijo: “Si no hacen caso a Moisés y a los Profetas, tampoco se convencerán aunque alguien se levante de entre los muertos”».

Lucas 24:25

—¡Qué torpes son ustedes —les dijo—, y qué tardos de corazón para creer todo lo que han dicho los profetas!

Lucas 24:27

Entonces, comenzando por Moisés y por todos los Profetas, les explicó lo que se refería a él en todas las Escrituras.

Lucas 24:44

Luego dijo: —Cuando todavía estaba yo con ustedes, les decía que tenía que cumplirse todo lo que está escrito acerca de mí en la Ley de Moisés, en los Profetas y en los Salmos.

Juan 1:45

Felipe buscó a Natanael y le dijo: —Hemos encontrado a Jesús de Nazaret, el hijo de José, aquel de quien escribió Moisés en la Ley y de quien escribieron los profetas.

Juan 5:32

Otro es el que testifica en mi favor y me consta que es válido el testimonio que él da de mí.

Juan 5:36

»El testimonio con que yo cuento tiene más peso que el de Juan. Porque las obras que el Padre me ha encomendado que lleve a cabo, y que estoy haciendo, son las que testifican que el Padre me ha enviado.

Juan 5:40

Sin embargo, ustedes no quieren venir a mí para tener esa vida.

Juan 5:46

Si creyeran a Moisés, me creerían a mí, porque de mí escribió él.

Juan 7:52

—¿También tú eres de Galilea? —respondieron—. Investiga y verás que de Galilea no ha salido ningún profeta.

Hechos 13:27

Los habitantes de Jerusalén y sus gobernantes no reconocieron a Jesús. Por tanto, al condenarlo, cumplieron las palabras de los profetas que se leen todos los sábados.

Hechos 17:11

Estos eran de sentimientos más nobles que los de Tesalónica, de modo que estuvieron muy dispuestos a recibir el mensaje y todos los días examinaban las Escrituras para ver si era verdad lo que se les anunciaba.

Hechos 26:27

Rey Agripa, ¿cree usted en los profetas? ¡A mí me consta que sí!

Romanos 1:2

que por medio de sus profetas ya había prometido en las sagradas Escrituras.

Romanos 3:2

Mucho, desde cualquier punto de vista. En primer lugar, a los judíos se les confiaron las palabras mismas de Dios.

Deuteronomio 18:15

El Señor tu Dios hará surgir para ti y en medio de ti, de entre tus hermanos, un profeta como yo. A él sí lo escucharás.

Deuteronomio 18:18

Por eso levantaré entre sus hermanos un profeta como tú; pondré mis palabras en su boca y él les dirá todo lo que yo le mande.

Deuteronomio 29:29

Lo secreto pertenece al Señor nuestro Dios, pero lo revelado nos pertenece a nosotros y a nuestros hijos para siempre, para que obedezcamos todas las palabras de esta ley.

Deuteronomio 32:47

Porque no son palabras vanas para ustedes, sino que de ellas depende su vida; por ellas vivirán mucho tiempo en la tierra que van a poseer al otro lado del Jordán».

Colosenses 3:16

Que habite en ustedes la palabra de Cristo con toda su riqueza: instrúyanse y aconséjense unos a otros con toda sabiduría; canten salmos, himnos y canciones espirituales a Dios, con gratitud de corazón.

Hebreos 11:16

Antes bien, anhelaban una patria mejor, es decir, la celestial. Por lo tanto, Dios no se avergonzó de ser llamado su Dios y les preparó una ciudad.

Hebreos 11:35

Hubo mujeres que por la resurrección recobraron a sus muertos. Otros, en cambio, fueron torturados, pues para alcanzar una mejor resurrección no aceptaron que los pusieran en libertad.

Josué 1:8

Recita siempre el libro de la Ley y medita en él de día y de noche; cumple con cuidado todo lo que en él está escrito. Así prosperarás y tendrás éxito.

Apocalipsis 19:10

Me postré a sus pies para adorarlo. Pero él me dijo: «¡No, cuidado! Soy un siervo como tú y como tus hermanos que se mantienen fieles al testimonio de Jesús. ¡Adora solo a Dios! El testimonio de Jesús es el espíritu que inspira la profecía».