Biblia Todo Logo
La Biblia Online
- Anuncios -





Génesis 20:3 - Biblia Nueva Versión Internacional 2022

3 Pero aquella noche Dios apareció a Abimélec en sueños y le dijo: —Puedes darte por muerto a causa de la mujer que has tomado, porque ella es casada.

Ver Capítulo Copiar


Más versiones

Biblia Reina Valera 1960

3 Pero Dios vino a Abimelec en sueños de noche, y le dijo: He aquí, muerto eres, a causa de la mujer que has tomado, la cual es casada con marido.

Ver Capítulo Copiar

Biblia Nueva Traducción Viviente

3 Esa noche Dios se le apareció a Abimelec en un sueño y le dijo: —Eres hombre muerto, porque esa mujer que has tomado ¡ya está casada!

Ver Capítulo Copiar

Biblia Católica (Latinoamericana)

3 Pero en la noche Dios habló a Abimelec en sueños y le dijo: 'Date por muerto a causa de esa mujer que has tomado, porque es casada.

Ver Capítulo Copiar

La Biblia Textual 3a Edicion

3 Pero ’Elohim vino a Abimelec en un sueño aquella noche, y le dijo: He aquí, eres hombre muerto a causa de la mujer que tomaste, pues ella está casada y tiene marido.

Ver Capítulo Copiar

Biblia Serafín de Ausejo 1975

3 Pero Dios vino a Abimélec en sueños durante la noche, y le dijo: 'Mira que vas a morir por causa de la mujer que has tomado, pues está casada'.

Ver Capítulo Copiar

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

3 Pero Dios vino a Abimelec en sueños de noche, y le dijo: He aquí muerto eres a causa de la mujer que has tomado, la cual es casada con marido.

Ver Capítulo Copiar




Génesis 20:3
22 Referencias Cruzadas  

Pero por causa de Saray, la esposa de Abram, el Señor castigó al faraón y a su familia con grandes plagas.


Entonces el faraón llamó a Abram y dijo: «¿Qué me has hecho? ¿Por qué no me dijiste que era tu esposa?


Pero ahora devuelve esa mujer a su esposo, pues él es profeta y va a interceder por ti para que vivas. Si no lo haces, debes saber que sin duda morirás junto con todos los tuyos.


Allí soñó que había una escalinata apoyada en la tierra y cuyo extremo superior llegaba hasta el cielo. Por ella subían y bajaban los ángeles de Dios.


Pero esa misma noche Dios se apareció en un sueño a Labán, el arameo, y le dijo: «¡Cuidado con amenazar a Jacob!».


Cierto día José tuvo un sueño y cuando se lo contó a sus hermanos, estos le tuvieron más odio todavía,


Después José tuvo otro sueño y se lo contó a sus hermanos. Les dijo: —Tuve otro sueño en el que veía que el sol, la luna y once estrellas se inclinaban ante mí.


una noche los dos funcionarios, es decir, el copero y el panadero, tuvieron cada uno un sueño, cada sueño con su propio significado.


—Los dos tuvimos un sueño —respondieron—, y no hay nadie que nos lo interprete. —¿Acaso no es Dios quien da la interpretación? —preguntó José—. ¿Por qué no me cuentan lo que soñaron?


Esa noche Dios habló a Israel en una visión: —¡Jacob! ¡Jacob! —Aquí estoy —respondió.


a nadie permitió que los oprimiera, sino que por causa de ellos reprendió a los reyes:


Algunas veces en sueños, otras veces en visiones nocturnas, cuando caemos en un sopor profundo o cuando dormitamos en el lecho,


para apartarnos de hacer lo malo y alejarnos de la soberbia;


a nadie permitió que los oprimiera, sino que por causa de ellos reprendió a los reyes:


Jonás entró en la ciudad y la recorrió todo un día, mientras proclamaba: «¡Dentro de cuarenta días Nínive será destruida!».


Dios apareció a Balán y dijo: —¿Quiénes son estos hombres que están contigo?


Pero cuando él estaba considerando hacerlo, se le apareció en sueños un ángel del Señor y le dijo: «José, hijo de David, no temas recibir a María por esposa, porque ella ha concebido por el poder del Espíritu Santo.


Mientras Pilato estaba sentado en el tribunal, su esposa le envió el siguiente recado: «No te metas con ese justo, pues, por causa de él, hoy he sufrido mucho en un sueño».


Síguenos en:

Anuncios


Anuncios


¡Síguenos en WhatsApp! Síguenos