Biblia Todo Logo
La Biblia Online

- Anuncios -





2 Reyes 12:8 - Biblia Nueva Versión Internacional 2022

8 Los sacerdotes accedieron a no recibir más dinero del pueblo, y renunciaron al encargo de restaurar el Templo.

Ver Capítulo Copiar


Más versiones

Biblia Reina Valera 1960

8 Y los sacerdotes consintieron en no tomar más dinero del pueblo, ni tener el cargo de reparar las grietas del templo.

Ver Capítulo Copiar

Biblia Nueva Traducción Viviente

8 Así que los sacerdotes acordaron no aceptar más dinero de la gente y también estuvieron de acuerdo en que otros tomaran la responsabilidad de reparar el templo.

Ver Capítulo Copiar

Biblia Católica (Latinoamericana)

8 El rey Yoás llamó entonces al sacerdote Yoyada y a los demás sacerdotes, y les dijo: '¿Por qué no han hecho las reparaciones de la Casa? En adelante ustedes no les recibirán más el dinero a la gente sino que lo destinarán para la reparación del Templo'.

Ver Capítulo Copiar

La Biblia Textual 3a Edicion

8 Y los sacerdotes consintieron en no tomar más dinero del pueblo, ni estar a cargo de reparar los daños de la Casa.

Ver Capítulo Copiar

Biblia Serafín de Ausejo 1975

8 Entonces llamó el rey Joás al sacerdote Joadá y a los demás sacerdotes y les dijo: '¿Por qué no habéis reparado los desperfectos del templo? En adelante, no recibiréis ya dinero de entre los vuestros, sino que lo entregaréis para la reparación del templo'.

Ver Capítulo Copiar




2 Reyes 12:8
4 Referencias Cruzadas  

el rey llamó al sacerdote Joyadá y a los otros sacerdotes para recriminarles: «¿Por qué no han comenzado la restauración del Templo? De aquí en adelante, ya no recibirán dinero de manos de los tesoreros, y deberán entregar lo que tengan para que se repare el Templo».


Sin embargo, el sacerdote Joyadá tomó un cofre y, después de hacer una ranura en la tapa, lo puso junto al altar, a la derecha, según se entra en el Templo del Señor. Los sacerdotes que vigilaban la entrada comenzaron a poner en el cofre todo el dinero que la gente traía al Templo del Señor.


«Preséntate ante el sumo sacerdote Jilquías y encárgale que recoja el dinero que el pueblo ha llevado al Templo del Señor y ha entregado a los que vigilaban la entrada.


Por eso el rey ordenó que se hiciera un cofre y se colocara afuera, junto a la puerta del Templo del Señor.


Síguenos en:

Anuncios


Anuncios