Biblia Todo Logo
La Biblia Online

- Anuncios -





1 Juan 4:1 - Biblia Nueva Versión Internacional 2022

1 Queridos hermanos, no crean a cualquier espíritu, sino sométanlo a prueba para ver si es de Dios, porque han salido por el mundo muchos falsos profetas.

Ver Capítulo Copiar


Más versiones

Biblia Reina Valera 1960

1 Amados, no creáis a todo espíritu, sino probad los espíritus si son de Dios; porque muchos falsos profetas han salido por el mundo.

Ver Capítulo Copiar

Biblia Nueva Traducción Viviente

1 Queridos amigos, no les crean a todos los que afirman hablar de parte del Espíritu. Pónganlos a prueba para averiguar si el espíritu que tienen realmente proviene de Dios, porque hay muchos falsos profetas en el mundo.

Ver Capítulo Copiar

Biblia Católica (Latinoamericana)

1 Queridos míos, no se fíen de cualquier inspiración. Examinen los espíritus para ver si vienen de Dios, porque andan por el mundo muchos falsos profetas.

Ver Capítulo Copiar

La Biblia Textual 3a Edicion

1 Amados, no creáis a todo espíritu, sino probad los espíritus, si proceden de Dios; porque muchos falsos profetas han salido al mundo.

Ver Capítulo Copiar

Biblia Serafín de Ausejo 1975

1 Queridos míos, no os fiéis de todo espíritu, sino examinad si los espíritus son de Dios, porque han salido al mundo muchos falsos profetas.

Ver Capítulo Copiar




1 Juan 4:1
29 Referencias Cruzadas  

sométanlo todo a prueba, aférrense a lo bueno,


En el pueblo hubo falsos profetas. También entre ustedes habrá falsos maestros que encubiertamente introducirán herejías destructivas, al extremo de negar al mismo Soberano Señor que los rescató. Esto les traerá una pronta destrucción.


El Espíritu dice claramente que, en los últimos tiempos, algunos abandonarán la fe para seguir a inspiraciones engañosas y doctrinas diabólicas.


Es que han salido por el mundo muchos engañadores que no confiesan que Jesucristo ha venido en cuerpo. El que así actúa es el engañador y el anticristo.


El inexperto cree todo lo que le dicen; el prudente se fija por dónde va.


En cuanto a los profetas, que hablen dos o tres y que los demás examinen con cuidado lo dicho.


Queridos hijos, esta es la hora final y así como ustedes oyeron que el anticristo vendría, muchos son los anticristos que han surgido ya. Por eso nos damos cuenta de que esta es la hora final.


»¿Por qué no juzgan por ustedes mismos lo que es justo?


—Tengan cuidado; no se dejen engañar —les advirtió Jesús—. Vendrán muchos que, usando mi nombre, dirán: “Yo soy”, y: “El tiempo está cerca”. No los sigan ustedes.


mientras que esos malvados farsantes irán de mal en peor, engañando y siendo engañados.


»Conozco tus obras, tu duro trabajo y tu perseverancia. Sé que no puedes soportar a los malvados y que has puesto a prueba a los que dicen ser apóstoles, pero no lo son; has descubierto que son falsos.


a otros, poderes milagrosos; a otros, profecía; a otros, el discernir espíritus; a otros, el hablar en diversas lenguas; y a otros, el interpretar lenguas.


Sé que después de mi partida entrarán en medio de ustedes lobos feroces que procurarán acabar con el rebaño.


Entonces, si alguien les dice: “¡Miren, aquí está el Cristo!” o “¡Miren, allí está!”, no lo crean.


Los profetas profieren mentiras, los sacerdotes gobiernan a su antojo, ¡y mi pueblo tan campante! Pero ¿qué van a hacer ustedes cuando todo haya terminado?


Estos eran de sentimientos más nobles que los de Tesalónica, de modo que estuvieron muy dispuestos a recibir el mensaje y todos los días examinaban las Escrituras para ver si era verdad lo que se les anunciaba.


El anciano respondió: —También yo soy profeta, como tú. Y un ángel, obedeciendo la palabra del Señor, me dijo: “Llévalo a tu casa para que coma pan y beba agua”. Así lo engañó


El Señor me contestó: «Esos profetas están profetizando mentiras en mi nombre. Yo no los he enviado, ni he dado ninguna orden, ni siquiera les he hablado. Lo que están profetizando son visiones engañosas, adivinaciones vanas y delirios de su propia imaginación.


Así dice el Señor de los Ejércitos: «No escuchen lo que dicen los profetas, pues alientan en ustedes falsas esperanzas; cuentan visiones que se han imaginado y que no proceden de la boca del Señor.


que no pierdan la cabeza ni se alarmen por ciertas profecías, ni por mensajes orales o escritos supuestamente nuestros, que digan: «¡Ya llegó el día del Señor!».


Queridos hermanos, lo que escribo no es un mandamiento nuevo, sino uno antiguo que han tenido desde el principio. Este mandamiento antiguo es el mensaje que ya oyeron.


Querido hermano, no imites lo malo, sino lo bueno. El que hace lo bueno es de Dios; el que hace lo malo no ha visto a Dios.


Síguenos en:

Anuncios


Anuncios