Lucas 16:6 - La Palabra (versión española)

⁶ Le contestó: «Cien barriles de aceite». El administrador le dijo: «Pues mira, toma tus recibos y apunta solo cincuenta».

Más versiones

Biblia Reina Valera 1960

⁶ Él dijo: Cien barriles de aceite. Y le dijo: Toma tu cuenta, siéntate pronto, y escribe cincuenta.

Biblia Nueva Traducción Viviente

⁶ El hombre contestó: “Le debo cien medidas de aceite de oliva”. Entonces el administrador le dijo: “Toma la factura y cámbiala a cincuenta medidas”.

Biblia Católica (Latinoamericana)

⁶ ¿Cuánto debes a mi patrón? Le contestó: 'Cien barriles de aceite. Le dijo el administrador: 'Toma tu recibo, siéntate y escribe en seguida cincuenta.

La Biblia Textual 3a Edicion

⁶ Y él dijo: Cien barriles de aceite. Y le dijo: Toma tu cuenta, siéntate° y escribe rápido cincuenta.

Biblia Serafín de Ausejo 1975

⁶ Éste contestó: 'Cien medidas de aceite'. Entonces le dijo él: 'Pues toma tu recibo, siéntate ahí y escribe en seguida que son cincuenta.'

Lucas 16:6 Referencias Cruzadas

Mateo 20:8

Al anochecer, el amo de la viña ordenó a su capataz: «Llama a los jornaleros y págales su salario, empezando por los últimos hasta los primeros».

Lucas 16:12

Y si no sois fieles con lo ajeno, ¿quién os dará lo que os pertenece?

Lucas 16:5

Comenzó entonces a llamar, uno por uno, a los deudores de su amo. Al primero le preguntó: «¿Cuánto debes a mi amo?».

Lucas 16:7

Al siguiente le preguntó: «¿Tú cuánto le debes?». Le contestó: «Cien sacos de trigo». Le dijo el administrador: «Pues mira, toma tus recibos y apunta solo ochenta».

Lucas 16:9

Por eso, os aconsejo que os ganéis amigos utilizando las riquezas de este mundo. Así, cuando llegue el día de dejarlas, habrá quien os reciba en la mansión eterna.

Juan 2:6

Había allí seis tinajas de piedra, de las que utilizaban los judíos para sus ritos purificatorios, con una capacidad de entre setenta y cien litros cada una.

Tito 2:10

ni los engañen. Al contrario, que les profesen una perfecta y plena fidelidad para así honrar en cualquier circunstancia la enseñanza recibida de Dios, nuestro Salvador.