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Juan 16:2 - La Palabra (versión española)

2 Porque os expulsarán de la sinagoga. Más aún, llegará un momento en que os quitarán la vida, convencidos de que con ello rinden culto a Dios.

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Más versiones

Biblia Reina Valera 1960

2 Os expulsarán de las sinagogas; y aun viene la hora cuando cualquiera que os mate, pensará que rinde servicio a Dios.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

2 Los expulsarán de las sinagogas, y llegará el tiempo en que quienes los maten pensarán que están haciendo un servicio santo para Dios.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

2 Serán expulsados de las comunidades judías; más aún, se acerca el tiempo en que cualquiera que los mate pensará que está sirviendo a Dios.

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La Biblia Textual 3a Edicion

2 Os echarán de las sinagogas,° y llega la hora cuando cualquiera que os mate,° piense que ofrece servicio a Dios.

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

2 Os echarán de las sinagogas; más aún, llega la hora en que todo aquel que os mate creerá dar culto a Dios.

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Juan 16:2
27 Referencias Cruzadas  

que decía: «No te acerques, no me toques, que estoy consagrado». Todo esto enciende mi cólera, como un fuego que arde sin parar.


Escuchad la palabra del Señor, vosotros que tembláis ante ella. Dicen vuestros hermanos, que os odian, que os detestan a causa de mi nombre: «Que el Señor muestre su gloria y veremos en qué para vuestro gozo». ¡Pues van a quedar confundidos!


La gente sabia del pueblo instruirá a muchos, aunque durante algún tiempo caerán víctimas de la espada, serán quemados o soportarán cautiverios y saqueos.


No tengáis miedo de los que pueden matar el cuerpo, pero no pueden matar el alma. Más bien tened miedo de aquel que puede destruir el cuerpo y el alma en la gehena.


En aquellos días os maltratarán y os matarán. Todo el mundo os odiará por causa de mí.


Felices vosotros cuando los demás os odien, os echen de su lado, os insulten y proscriban vuestro nombre como infame por causa del Hijo del hombre.


A pesar de todo, fueron muchos, incluso entre los jefes judíos, los que creyeron en Jesús. Pero no se atrevían a manifestarlo públicamente, porque temían que los fariseos los expulsaran de la sinagoga.


Hasta ahora os he hablado en lenguaje figurado; pero llega el momento en que no recurriré más a este lenguaje, sino que os hablaré del Padre en forma clara y directa.


Pues mirad, se acerca el momento, mejor dicho, ha llegado ya, en que cada uno de vosotros se dispersará por su lado y me dejaréis solo. Aunque yo no estoy solo, porque el Padre está conmigo.


Jesús le contesta: —Créeme, mujer, está llegando el momento en que, para dar culto al Padre, no tendréis que subir a este monte ni ir a Jerusalén.


Está llegando el momento, mejor dicho, ha llegado ya, en que los verdaderos adoradores rendirán culto al Padre en espíritu y en verdad, porque estos son los adoradores que el Padre quiere.


Los padres contestaron así por miedo a los judíos, pues estos habían tomado la decisión de expulsar de la sinagoga a todos los que reconocieran que Jesús era el Mesías.


Ellos replicaron: —¿Es que pretendes darnos lecciones a nosotros, tú, que de pies a cabeza naciste envuelto en pecado? Y lo expulsaron de la sinagoga.


Los miembros del Consejo perdieron los estribos al oír esto y querían matarlos.


—Escuchadme —dijo—, veo el cielo abierto y al Hijo del hombre de pie junto a Dios.


si nos calumnian, respondemos con bondad. Total, que hasta este momento somos la basura del mundo, el desecho de la humanidad.


apasionado perseguidor de la Iglesia y del todo irreprochable en lo que se refiere al recto cumplimiento de la ley.


El Cordero rompió el quinto sello, y vi debajo del altar, vivos, los que habían sido asesinados por haber proclamado la palabra de Dios y haber dado testimonio de su fe.


La gente de la ciudad dijo entonces a Joás: —Entréganos a tu hijo, y que muera, porque ha derruido el altar de Baal y ha cortado el árbol sagrado que se alzaba a su lado.


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