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Levítico 10:2 - Biblia Universidad de Jerusalem

2 Entonces salió de la presencia de Adonai un fuego que los devoró, y murieron delante de Adonai.

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Más versiones

Biblia Reina Valera 1960

2 Y salió fuego de delante de Jehová y los quemó, y murieron delante de Jehová.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

2 Como consecuencia, un fuego ardiente salió de la presencia del Señor y los consumió por completo, y murieron ahí ante el Señor.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

2 Y en eso, un fuego salió de la presencia de Yavé que los devoró, y murieron allí delante de Yavé.

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La Biblia Textual 3a Edicion

2 Y de la presencia de YHVH salió un fuego que los consumió y murieron en presencia de YHVH.°

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

2 Salió de delante de Yahveh un fuego que los abrasó, y cayeron muertos ante Yahveh.

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Levítico 10:2
25 Referencias Cruzadas  

Entonces la ira de Adonai se encendió contra Uzzá: allí mismo le hirió Di-s por este atrevimiento y murió allí junto al arca de Di-s.


Partió, y halló el cadáver tendido en el camino, y al asno y al león que permanecían junto al cadáver. El león no había devorado el cadáver ni había destrozado al asno.


Cayó el fuego de Adonai que devoró el holocausto y la leña, y lamió el agua de las zanjas.


Respondió Elías y dijo al jefe de cincuenta: 'Si soy hombre de Di-s, que baje fuego del cielo y te devore a ti y a tus cincuenta.' Bajó fuego del cielo que le devoró a él y a sus cincuenta.


Respondió Elías y le dijo: 'Si soy hombre de Di-s, que baje fuego del cielo y te devore a ti y a tus cincuenta.' Bajó fuego del cielo que le devoró a él y a sus cincuenta.


Se encendió contra Uzzá la ira de Adonai y le hirió por haber extendido su mano hacia el arca; y Uzzá murió allí delante de Di-s.


pues por no haber estado vosotros la vez primera, Adonai, nuestro Di-s, hizo brecha en nosotros, ya que no le consultamos conforme a la norma.'


Nadab y Abihú murieron antes que su padre, sin tener hijos, de modo que ejercieron las funciones sacerdotales Eleazar e Itamar.


Todavía estaba éste hablando, cuando llegó otro que dijo: 'Cayó del cielo el fuego de Di-s, que quemó las ovejas y pastores hasta consumirlos. Sólo yo pude escapar para traerte la noticia.'


viene nuestro Di-s y no se callará.Delante de él, un fuego que devora, en torno a él, violenta tempestad;


Dijo a Moisés: 'Sube donde Adonai, tú, Aarón, Nadab y Abihú, con setenta de los ancianos de Israel; os postraréis desde lejos.


Porque de antemano está preparado un Tófet - también para el rey - un foso profundo y ancho; hay paja y madera en abundancia.El aliento de Adonai, cual torrente de azufre, lo enciende.


Se acercaron y los llevaron en sus propias túnicas fuera del campamento, como Moisés había mandado.


Adonai habló a Moisés después de la muerte de los dos hijos de Aarón que murieron al acercarse a Adonai.


Salió fuego de la presencia de Adonai que consumió el holocausto y las partes grasas puestas sobre el altar. Todo el pueblo al verlo prorrumpió en gritos de júbilo y cayó rostro en tierra.


aquellos hombres que habían hablado mal del país, cayeron muertos delante de Adonai.


Brotó fuego de Adonai, que devoró a los 250 hombres que habían ofrecido el incienso.


Nadab y Abihú murieron al ofrecer fuego profano delante de Adonai.


Al instante ella cayó a sus pies y expiró. Entrando los jóvenes, la hallaron muerta, y la llevaron a enterrar junto a su marido.


Al oír Ananías estas palabras, cayó y expiró. Y un gran temor se apoderó de cuantos lo oyeron.


Todo esto les acontecía en figura, y fue escrito para aviso de los que hemos llegado a la plenitud de los tiempos.


De entre los habitantes de Bet Semes, los hijos de Jeconías no se alegraron cuando vieron el arca de Adonai y castigo Adonai a setenta de sus hombres. El pueblo hizo duelo porque Adonai los había castigado duramente.


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