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Éxodo 32:1 - Biblia Universidad de Jerusalem

1 Cuando el pueblo vio que Moisés tardaba en bajar del monte, se reunió el pueblo en torno a Aarón y le dijeron: 'Anda, haznos un dios que vaya delante de nosotros, ya que no sabemos qué ha sido de Moisés, el hombre que nos sacó de la tierra de Egipto.'

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Más versiones

Biblia Reina Valera 1960

1 Viendo el pueblo que Moisés tardaba en descender del monte, se acercaron entonces a Aarón, y le dijeron: Levántate, haznos dioses que vayan delante de nosotros; porque a este Moisés, el varón que nos sacó de la tierra de Egipto, no sabemos qué le haya acontecido.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

1 Cuando los israelitas vieron que Moisés tardaba tanto en bajar del monte, se juntaron alrededor de Aarón y le dijeron: —Vamos, haznos dioses que puedan guiarnos. No sabemos qué le sucedió a ese tipo, Moisés, el que nos trajo aquí desde la tierra de Egipto.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

1 Moisés no bajaba del cerro y le pareció al pueblo un tiempo largo. Se reunieron en torno a Aarón, al que dijeron: 'Fabrícanos un Dios que nos lleve adelante, ya que no sabemos qué ha sido de Moisés, que nos sacó de Egipto.

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La Biblia Textual 3a Edicion

1 Pero como el pueblo vio que Moisés tardaba en bajar del monte, se reunió el pueblo alrededor de Aarón, y le dijeron: ¡Levántate, haznos dioses que vayan delante de nosotros! Porque este Moisés, el varón que nos sacó de la tierra de Egipto, no sabemos qué le haya acontecido.°

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

1 Viendo el pueblo que Moisés tardaba en bajar de la montaña, se congregó en torno a Aarón y le dijo: 'Anda, haznos dioses que vayan delante de nosotros, pues a ese Moisés, a ese hombre que nos sacó de Egipto, no sabemos qué le ha pasado'.

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Éxodo 32:1
35 Referencias Cruzadas  

Salió Lot y habló con sus yernos, los prometidos de sus hijas: 'Levantaos, dijo, salid de este lugar, porque Adonai va a destruir la ciudad.' Pero sus yernos le tomaron a broma.


Y dijo Abimélek: 'No sé quién ha hecho eso. Ni tú me lo habías notificado, ni yo había oído nada hasta hoy.'


Pero él rehusó y dijo a la mujer de su señor: 'He aquí que mi señor no me controla nada de lo que hay en su casa, y todo cuanto tiene me lo ha confiado.


José les dijo: '¿Qué habéis hecho? ¡ ignorabais que uno como yo tenía que adivinarlo sin falta?'


Salieron de la ciudad, y no bien se habían alejado, cuando José dijo a su mayordomo: 'Levántate y persigue a esos hombres, les das alcance y les dices: ¿Por qué habéis pagado mal por bien?


En Horeb se fabricaron un becerro, se postraron ante un metal fundido,


Adonai iba al frente de ellos, de día en columna de nube para guiarlos por el camino, y de noche en columna de fuego para alumbrarlos, de modo que pudiesen marchar de día y de noche.


Y dijeron a Moisés: '¿Acaso no había sepulturas en Egipto para que nos hayas traído a morir en el desierto? ¿Qué has hecho con nosotros sacándonos de Egipto?


Los israelitas les decían: '¡Ojalá hubiéramos muerto a manos de Adonai en la tierra de Egipto cuando nos sentábamos junto a las ollas de carne, cuando comíamos pan hasta hartarnos! Vosotros nos habéis traído a este desierto para matar de hambre a toda esta asamblea.'


No haréis junto a mí dioses de plata, ni os haréis dioses de oro.


Dijo Adonai a Moisés: 'Sube hasta mí, al monte; quédate allí, y te daré las tablas de piedra - la ley y los mandamientos - que tengo escritos para su instrucción.'


Moisés entró dentro de la nube y subió al monte. Y permaneció Moisés en el monte cuarenta días y cuarenta noches.


Pero Moisés trató de aplacar a Adonai su Di-s, diciendo: '¿Por qué, oh Adonai, ha de encenderse tu ira contra tu pueblo, el que tú sacaste de la tierra de Egipto con gran poder y mano fuerte?


Aarón respondió: 'No se encienda la ira de mi señor. Tú mismo sabes que este pueblo es inclinado al mal.


Me dijeron: 'Haznos un dios que vaya delante de nosotros, ya que no sabemos qué le ha sucedido a Moisés, el hombre que nos sacó de la tierra de Egipto.'


Entonces habló Adonai a Moisés, y dijo: '¡Anda, baja! Porque tu pueblo, el que sacaste de la tierra de Egipto, ha pecado.


Sube a una tierra que mana leche y miel; que yo no subiré contigo, pues eres un pueblo de dura cerviz; no sea que te destruya en el camino.'


Pero ellos se rebelaron contra mí y no quisieron escucharme. Ninguno arrojó los monstruos que seducían sus ojos; ninguno abandonó las basuras de Egipto. Pensé entonces, derramar mi furor sobre ellos y desahogar en ellos mi cólera, en medio del país de Egipto.


Huyó Jacob a la campiña de Aram, sirvió Israel por una mujer, por una mujer guardó rebaños.


¿En que te hice subir del país de Egipto, y de la casa de servidumbre te rescaté, y mandé delante de ti a Moisés,Aarón y María?


que ninguno de los que han visto mi gloria y las señales que he realizado en Egipto y en el desierto, que me han puesto a prueba ya diez veces y no han escuchado mi voz,


Entendedlo bien: si el dueño de casa supiese a qué hora de la noche iba a venir el ladrón, estaría en vela y no permitiría que le horadasen su casa.


Pero si el mal siervo aquel se dice en su corazón: 'Mi señor tarda',


'Si somos, pues, del linaje de Di-s, no debemos pensar que la divinidad sea algo semejante al oro, la plata o la piedra, modelados por el arte y el ingenio humano.


pero estáis viendo y oyendo decir que no solamente en Éfeso, sino en casi toda el Asia, ese Pablo persuade y aparta a mucha gente, diciendo que no son Di-ses los que se fabrican con las manos.


=y dijeron a Aarón: 'Haznos Di-ses que vayan delante de nosotros; porque este Moisés que nos sacó de la tierra de Egipto no sabemos qué ha sido de él.'=


Adonai marchará delante de ti, él estará contigo; no te dejará ni te abandonará. No temas ni te asustes.'


Escucha, Israel. Hoy vas a pasar ya el Jordán para ir a desalojar a naciones más grandes y fuertes que tú, ciudades grandes, de murallas que llegan hasta el cielo,


Yo había subido al monte a recoger las tablas de piedra, las tablas de la alianza que Adonai había concluido con vosotros. Permanecí en el monte cuarenta días y cuarenta noches sin comer pan ni beber agua.


Levántate, purifica al pueblo y diles: Purificaos para mañana, porque así dice Adonai, el Di-s de Israel: El anatema está dentro de ti, Israel; no podrás mantenerte delante de tus enemigos hasta que extirpéis el anatema de entre vosotros.


que dirán en son de burla: '¿Dónde queda la promesa de su Venida? Pues desde que murieron los Padres, todo sigue como al principio de la creación'.


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