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2 Samuel 12:16 - Biblia Universidad de Jerusalem

16 David suplicó a Di-s por el niño; hizo David un ayuno riguroso y entrando en casa pasaba la noche acostado en tierra.

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Más versiones

Biblia Reina Valera 1960

16 Entonces David rogó a Dios por el niño; y ayunó David, y entró, y pasó la noche acostado en tierra.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

16 Así que David le suplicó a Dios que perdonara la vida de su hijo, y no comió, y estuvo toda la noche tirado en el suelo.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

16 David pidió a Dios por su hijo, se negaba a comer y cuando regresó a su casa, dormía en el suelo.

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La Biblia Textual 3a Edicion

16 Y David rogó a Ha-’Elohim por el niño, y ayunó David y se retiró, y pasaba la noche acostado en el suelo.

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

16 Rogó David a Dios por el niño, ayunaba con rigor y pasaba las noches acostado en el suelo.

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2 Samuel 12:16
17 Referencias Cruzadas  

Y Natán se fue a su casa. Hirió Adonai al niño que había engendrado a David la mujer de Urías y enfermó gravemente.


Respondió: 'Mientras el niño vivía ayuné y lloré, pues me decía: ¿Quién sabe si Adonai tendrá compasión de mí y el niño vivirá?


Se levantó el rey, rasgó sus vestidos y se echó en tierra; todos los servidores que estaban a su lado rasgaron también, sus vestidos.


Cuando Ajab oyó estas palabras desgarró sus vestidos y se puso un sayal sobre su carne, ayunó y se acostó con el sayal puesto; y caminaba a paso lento.


Al oír estas palabras me senté y me puse a llorar; permanecí en duelo algunos días ayunando y orando ante el Di-s del cielo.


e invócame en el día de la angustia, te libraré y tú me darás gloria.'


(11) Si mortifico mi alma con ayuno, se me hace un pretexto de insulto;


Llamaba el Señor Adonai Sebaot aquel día a lloro y a lamento y a raparse y ceñirse de sayal,


Adonai, en el aprieto de tu castigo te buscamos; la angustia de la opresión era tu castigo para nosotros.


Se trajo una piedra que fue colocada a la entrada del foso, y el rey la selló con su anillo y con el anillo de sus dignatarios, para que no se pudiese cambiar la suerte de Daniel.


Volví mi rostro hacia el Señor Di-s para implorarle con oraciones y súplicas, en ayuno, sayal y ceniza.


¡Quién sabe! Quizás vuelva Di-s y se arrepienta, se vuelva del ardor de su cólera, y no perezcamos.'


Pasó tres días sin ver, sin comer y sin beber.


Josué desgarró sus vestidos, se postró rostro en tierra delante del arca de Adonai hasta la tarde, junto con los ancianos de Israel, y todos esparcieron polvo sobre sus cabezas.


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