Proverbios 3:1 - Biblia Martin Nieto

¹ Hijo mío, no olvides mi enseñanza, y que tu corazón guarde mis preceptos;

Más versiones

Biblia Reina Valera 1960

¹ Hijo mío, no te olvides de mi ley, Y tu corazón guarde mis mandamientos;

Biblia Nueva Traducción Viviente

¹ Hijo mío, nunca olvides las cosas que te he enseñado; guarda mis mandatos en tu corazón.

Biblia Católica (Latinoamericana)

¹ Hijo mío, no te olvides de mis advertencias, que tu corazón sepa guardar mis mandamientos.

La Biblia Textual 3a Edicion

¹ Hijo mío, no olvides mis enseñanzas, Y tu corazón guarde mis mandamientos.

Biblia Serafín de Ausejo 1975

¹ Hijo mío, no olvides mis enseñanzas y guarda mis preceptos en tu corazón,

Proverbios 3:1 Referencias Cruzadas

Salmos 119:11

dentro de mi corazón conservo tus órdenes para no pecar nunca contra ti.

Salmos 119:153

Mira mi miseria y sálvame, pues yo no me he olvidado de tu ley;

Salmos 119:16

en tus decretos encuentro mis delicias, no olvido tu palabra.

Salmos 119:176

Ando errante como oveja perdida; búscame, pues no me he olvidado de tus mandamientos.

Salmos 119:34

dame inteligencia para cumplir tu ley y yo la guardaré de todo corazón;

Salmos 119:61

las redes de los malhechores me han aprisionado, pero yo no he olvidado tu ley;

Salmos 119:93

jamás me olvidaré de tus preceptos, pues con ellos me has vuelto a dar la vida;

Salmos 91:16

le daré una larga vida, le haré gozar de mi salvación.

Éxodo 20:6

pero demuestro mi fidelidad por mil generaciones a todos los que me aman y guardan mis mandamientos.

Proverbios 1:8

Escucha, hijo mío, la instrucción de tu padre, y no rechaces la enseñanza de tu madre,

Proverbios 16:31

Los cabellos blancos son una corona de honor, por el camino de la justicia se la encuentra.

Proverbios 2:1

Hijo mío, si tú recibes mis palabras y guardas dentro de ti mis mandamientos,

Proverbios 23:26

Hijo mío, dame tu corazón y ten los ojos fijos en mis consejos.

Proverbios 31:5

No sea que, bebiendo, olviden las leyes y alteren el derecho de todos los afligidos.

Proverbios 4:2

porque yo os doy una buena doctrina; no abandonéis mi enseñanza.

Proverbios 4:21

nunca se aparten de tus ojos; guárdalas en el fondo del corazón,

Proverbios 4:5

Adquiere la sabiduría, adquiere la inteligencia, no la olvides, no te apartes de las palabras de mi boca.

Proverbios 8:1

¿No llama la sabiduría, no levanta su voz la inteligencia?

Proverbios 9:1

La sabiduría edificó su casa, labró sus siete columnas,

Isaías 51:17

Despierta, despierta, levántate, Jerusalén; tú que has bebido de la mano del Señor la copa de su cólera; el cáliz del vértigo lo has bebido hasta las heces.

Jeremías 31:33

Ésta es la alianza que haré con la casa de Israel después de aquellos días -dice el Señor-: pondré mi ley en su interior, la escribiré en su corazón, y seré su Dios y ellos serán mi pueblo.

Oseas 4:6

Mi pueblo será reducido al silencio por falta de ciencia; tú has rechazado el saber, y yo te rechazaré a ti de mi sacerdocio; has olvidado la ley de tu Dios, también yo me olvidaré de tus hijos.

Deuteronomio 4:23

Guardaos, pues, de olvidar la alianza que el Señor, vuestro Dios, ha hecho con vosotros y no os hagáis esculturas o imágenes talladas de todo lo que el Señor, tu Dios, te ha prohibido,

Deuteronomio 4:9

Pon atención, y no te olvides de lo que has visto con tus ojos ni lo dejes escapar nunca de tu corazón. Antes bien, enséñaselo a tus hijos y a tus nietos.

Deuteronomio 5:16

Honra a tu padre y a tu madre, como te lo ha ordenado el Señor, tu Dios; vivirás largos años y serás feliz en la tierra que te da el Señor, tu Dios.

Deuteronomio 5:33

Seguid en todo el camino que os ha mandado el Señor, vuestro Dios; de esta manera viviréis y seréis felices y serán largos vuestros días en la tierra que vais a poseer.

Deuteronomio 8:1

Guardad con cuidado y poned en práctica todos los mandamientos que hoy os prescribo para que viváis, os multipliquéis y entréis a poseer la tierra que el Señor juró a vuestros padres.