Proverbios 18:2 - Biblia Martin Nieto

² El necio no encuentra placer en la reflexión, sino en propalar sus pensamientos.

Más versiones

Biblia Reina Valera 1960

² No toma placer el necio en la inteligencia, Sino en que su corazón se descubra.

Biblia Nueva Traducción Viviente

² A los necios no les interesa tener entendimiento; solo quieren expresar sus propias opiniones.

Biblia Católica (Latinoamericana)

² Al tonto no le gusta reflexionar, sino dar a conocer sus opiniones.

La Biblia Textual 3a Edicion

² El necio no se deleita en la discreción, Sino en publicar lo que piensa.

Biblia Serafín de Ausejo 1975

² No le gusta al necio la prudencia, sino exponer su opinión.

Proverbios 18:2 Referencias Cruzadas

Proverbios 1:22

'¿Hasta cuándo, jóvenes inexpertos, amaréis la inexperiencia, los insolentes se deleitarán en la insolencia, y los necios aborrecerán la ciencia?

Proverbios 1:7

El temor del Señor es el principio de la sabiduría. Los insensatos desprecian la sabiduría y la disciplina.

Proverbios 12:23

El hombre prudente oculta su ciencia, el corazón del insensato publica su necedad.

Proverbios 13:16

El hombre sensato lo hace todo con reflexión, pero el necio manifiesta su insensatez.

Proverbios 17:16

¿Para qué sirve el dinero en manos de un necio? ¿Para adquirir la sabiduría? Él no tiene inteligencia.

Proverbios 18:3

Cuando viene el mal, viene también el desprecio; y con el deshonor, la vergüenza.

Eclesiastés 10:3

Y cuando el tonto se pone en camino, le falta la cordura y va diciendo a todo el mundo que es tonto.

Mateo 8:34

El pueblo entero salió al encuentro de Jesús y, al verlo, le rogaron que se fuera de allí.

1 Corintios 14:12

Así pues, ya que ambicionáis los dones espirituales, procurad tener los que sirven para la formación de la Iglesia.

1 Corintios 8:1

Sobre la carne ofrecida en sacrificio a los ídolos, está claro que todos tenemos la ciencia suficiente. Pero la ciencia envanece; lo único verdaderamente provechoso es el amor.

Filipenses 1:15

Cierto que algunos predican a Cristo por espíritu de envidia y competencia, pero otros lo hacen con recta intención,