Jeremías 2:29 - Biblia Martin Nieto

²⁹ ¿Por qué pretendéis pleitear conmigo? Todos vosotros me habéis sido infieles, dice el Señor.

Más versiones

Biblia Reina Valera 1960

²⁹ ¿Por qué porfías conmigo? Todos vosotros prevaricasteis contra mí, dice Jehová.

Biblia Nueva Traducción Viviente

²⁹ ¿Por qué me acusas de hacer el mal? Ustedes son los que se han rebelado —dice el Señor—.

Biblia Católica (Latinoamericana)

²⁹ ¿Por qué quieren ustedes meterme en pleito, cuando todos ustedes me han traicionado?, dice Yavé.

La Biblia Textual 3a Edicion

²⁹ ¿Por qué contendéis conmigo, Si todos os habéis rebelado contra mí?, dice YHVH.

Biblia Serafín de Ausejo 1975

²⁹ ¿Por qué discutís conmigo? Todos vosotros os habéis rebelado contra mí -oráculo de Yahveh-.

Jeremías 2:29 Referencias Cruzadas

Jeremías 2:23

¿Cómo te atreves a decir: 'No estoy manchada, no he ido en pos de los ídolos?'. Mira tus huellas en el valle, reconoce lo que has hecho, camella lasciva, errante por los caminos.

Jeremías 2:35

Y aún dices: 'Soy inocente; ¡oh, sí, su cólera se ha alejado de mí!'. Pues aquí estoy para juzgarte, ya que dices: No he pecado.

Jeremías 3:2

Alza los ojos hacia los collados y mira: ¿Hay un lugar en que no te hayas entregado? Junto a los caminos te sentabas, esperándolos como un árabe en el desierto. Has profanado esta tierra con tus prostituciones y tus crímenes.

Jeremías 5:1

Recorred las calles de Jerusalén, mirad, informaos bien, buscad por sus plazas, a ver si encontráis un hombre, uno solo que practique la justicia, que busque la verdad, y yo perdonaré a esta ciudad.

Jeremías 6:13

Pues desde el más chico hasta el mayor, todos están llenos de rapiña; desde el profeta al sacerdote, todos practican la estafa.

Daniel 9:11

Todo Israel ha quebrantado tu ley, se ha extraviado sin querer escuchar tu voz. Por esto nos han sobrevenido las maldiciones que están escritas bajo juramento en la ley de Moisés, siervo de Dios, porque hemos pecado contra él.

Romanos 3:19

Ahora bien, sabemos que todo lo que dice la ley lo dice para los que están bajo la ley; para que toda boca enmudezca y el mundo entero se reconozca culpable ante Dios.