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Éxodo 19:9 - Biblia Martin Nieto

9 Y el Señor dijo a Moisés: 'Yo llegaré hasta ti en una nube espesa, para que el pueblo oiga cuando yo hable contigo y tenga siempre fe en ti'. Y Moisés refirió al Señor las palabras del pueblo.

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Más versiones

Biblia Reina Valera 1960

9 Entonces Jehová dijo a Moisés: He aquí, yo vengo a ti en una nube espesa, para que el pueblo oiga mientras yo hablo contigo, y también para que te crean para siempre. Y Moisés refirió las palabras del pueblo a Jehová.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

9 Luego el Señor le dijo a Moisés: «Yo me presentaré ante ti en una densa nube, para que el pueblo pueda oírme cuando hable contigo; así ellos siempre confiarán en ti». Moisés le dijo al Señor lo que el pueblo había dicho.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

9 Yavé dijo a Moisés: 'Yo vendré a ti en medio de una espesa nube para que el pueblo oiga cuando yo hable contigo y tenga fe en ti también para siempre.

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La Biblia Textual 3a Edicion

9 Y YHVH dijo a Moisés: He aquí Yo vengo a ti en el espesor de la nube, para que el pueblo oiga cuando Yo hable contigo, y también crean en ti siempre. Y Moisés declaró a YHVH las palabras del pueblo.

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

9 Yahveh dijo a Moisés: 'Mira, yo vendré a ti en una densa nube, para que el pueblo oiga cuando yo hable contigo, y tenga siempre fe en ti'. Y Moisés refirió a Yahveh las palabras del pueblo.

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Éxodo 19:9
25 Referencias Cruzadas  

Entonces Salomón exclamó: 'Tú, Señor, has dicho que vives en la nube oscura.


Se levantaron de madrugada y salieron hacia el desierto de Técoa. Cuando salían, Josafat se adelantó y dijo: 'Escuchadme, habitantes de Judá y de Jerusalén. Tened confianza en el Señor, Dios nuestro, y estaréis seguros; tened fe en sus profetas, y triunfaréis'.


Entonces Salomón exclamó: 'Tú, Señor, has dicho que vives en la nube oscura.


Está rodeado de nubes y tinieblas, la justicia y el derecho son las bases de su trono.


Les hablaba en la columna de nube, guardaban sus preceptos y las leyes que les había dado.


Israel vio el prodigio que el Señor había obrado contra los egipcios, temió al Señor y creyó en él y en Moisés, su siervo.


Al tercer día, a eso del amanecer, hubo truenos y relámpagos, una espesa nube sobre la montaña y un sonido muy fuerte de trompeta; todo el pueblo, que estaba en el campamento, temblaba.


El pueblo se mantuvo a distancia, mientras Moisés se aproximó a la nube donde estaba el Señor.


El Señor bajó en la nube y se paró junto a él, y Moisés proclamó el nombre de El Señor.


El pueblo creyó, y comprendiendo que el Señor había visitado a los israelitas y había visto su opresión, se postraron y adoraron.


'Esto es para que crean que se te ha aparecido el Señor, Dios de tus padres, Dios de Abrahán, de Isaac y de Jacob'.


Oráculo contra Egipto: Ved al Señor que, cabalgando sobre una nube ligera, viene a Egipto. Los ídolos de Egipto tiemblan ante él, y el corazón de los egipcios desfallece en su pecho.


capital de Efraín es Samaría, y cabeza de Samaría el hijo de Romelías. Dentro de cinco o seis años, Efraín será destruido, dejará de ser pueblo. Si no creéis, no podréis subsistir.


El Señor bajó en la columna de nube y se paró a la entrada de la tienda. Llamó a Aarón y a María, y los dos se acercaron.


Aún estaba hablando, cuando una nube luminosa los cubrió, y una voz desde la nube dijo: 'Éste es mi hijo amado, mi predilecto, escuchadlo'.


Una nube los cubrió con su sombra; y desde la nube se oyó una voz: 'Éste es mi hijo amado. Escuchadlo'.


El que os escucha a vosotros me escucha a mí; y el que os rechaza a vosotros me rechaza a mí; y el que me rechaza a mí rechaza al que me ha enviado'.


Recuerda el día que estabas en presencia del Señor, tu Dios, en el Horeb, cuando el Señor me dijo: Reúne al pueblo en torno mío para que yo le haga oír mis palabras y sepan temerme todos los días de su vida sobre la tierra, y enseñen a hacer otro tanto a sus hijos.


Desde el cielo te habló para enseñarte, y sobre la tierra te ha hecho ver su gran fuego y, de en medio del fuego, has oído sus palabras.


Miradlo, viene entre nubes; lo verán todos, aun los que lo traspasaron, y se lamentarán sobre él todas las naciones de la tierra. Sí. Amén.


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