1 Pedro 1:3 - Biblia Martin Nieto

³ Bendito sea Dios Padre de nuestro Señor Jesucristo que llevado de su gran misericordia nos ha hecho nacer de nuevo mediante la resurrección de Jesucristo de entre los muertos a una esperanza viva

Más versiones

Biblia Reina Valera 1960

³ Bendito el Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo, que según su grande misericordia nos hizo renacer para una esperanza viva, por la resurrección de Jesucristo de los muertos,

Biblia Nueva Traducción Viviente

³ Que toda la alabanza sea para Dios, el Padre de nuestro Señor Jesucristo. Es por su gran misericordia que hemos nacido de nuevo, porque Dios levantó a Jesucristo de los muertos. Ahora vivimos con gran expectación

Biblia Católica (Latinoamericana)

³ Bendito sea Dios, Padre de Cristo Jesús, nuestro Señor, por su gran misericordia. Al resucitar a Cristo Jesús de entre los muertos, nos dio una vida nueva y una esperanza viva.

La Biblia Textual 3a Edicion

³ Bendito sea el Dios y Padre de nuestro Señor Jesús, el Mesías, que según su gran misericordia nos hizo renacer para una esperanza viva, por medio de la resurrección de Jesús el Mesías de entre los muertos,

Biblia Serafín de Ausejo 1975

³ Bendito Dios, Padre de nuestro Señor Jesucristo, quien según su gran misericordia, nos reengendró a una esperanza viva por la resurrección de Jesucristo de entre los muertos,

1 Pedro 1:3 Referencias Cruzadas

1 Pedro 1:23

como quienes han nacido de nuevo y no de una semilla corruptible sino incorruptible la palabra viva y eterna de Dios;

1 Juan 5:4

Porque todo lo que ha nacido de Dios vence al mundo. Y ésta es la victoria que ha vencido al mundo: nuestra fe.

Romanos 15:13

Que el Dios de la esperanza llene de alegría y paz vuestra fe, y que la fuerza del Espíritu Santo os colme de esperanza.

Efesios 1:7

Él nos ha obtenido con su sangre la redención, el perdón de los pecados, según la riqueza de su gracia,

2 Corintios 1:3

Bendito sea Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo, padre de las misericordias y de todo consuelo,

1 Juan 3:3

El que tiene esta esperanza en él se purifica a sí mismo, como él es puro.

Romanos 12:12

alegres en la esperanza, pacientes en los sufrimientos, constantes en la oración;

1 Juan 2:29

Si sabéis que él es justo, reconoced también que el que practica la justicia ha nacido de él.

Efesios 1:3

Bendito sea Dios, Padre de nuestro Señor Jesucristo, que nos ha bendecido en Cristo con toda clase de bendiciones espirituales y celestiales.

Éxodo 34:6

El Señor pasó delante de él y proclamó: 'El Señor, el Señor, Dios clemente y misericordioso, tardo para la ira y lleno de lealtad y fidelidad,

Efesios 3:20

A aquel que es poderoso para hacer muchísimo más de lo que pedimos o pensamos, en virtud de su poder que actúa en nosotros,

Efesios 1:17

para que el Dios de nuestro Señor Jesucristo, el Padre de la gloria, os conceda espíritu de sabiduría que os revele un conocimiento profundo de él;

1 Pedro 3:21

agua que presagiaba el bautismo, que ahora os salva a vosotros, no mediante la purificación de la inmundicia corporal sino mediante la súplica hecha a Dios por una conciencia buena la cual recibe su eficacia de la resurrección de Jesucristo,

Salmos 86:15

Mas tú, Señor, misericordioso y compasivo, paciente y lleno de amor y de lealtad,

1 Timoteo 1:14

la gracia de nuestro Señor me colmó de fe y de amor cristiano.

Efesios 2:4

Pero Dios, rico en misericordia, por el inmenso amor con que nos amó,

Santiago 1:18

Él nos ha engendrado según su voluntad por la palabra de la verdad, para que seamos como las primicias de sus criaturas.

Tito 2:13

mientras aguardamos el feliz cumplimiento de lo que se nos ha prometido y la manifestación gloriosa del gran Dios y Salvador nuestro Jesucristo,

1 Corintios 15:20

Pero Cristo ha resucitado de entre los muertos como primicias de los que mueren.

1 Corintios 13:13

Tres cosas hay que permanecen: la fe, la esperanza y el amor. Pero la más grande de las tres es el amor.

1 Juan 3:9

El que ha nacido de Dios no peca, porque la semilla de Dios permanece en él; y no puede pecar porque ha nacido de Dios.

1 Pedro 2:2

Como niños recién nacidos apeteced la leche espiritual no adulterada, para que alimentados con ella crezcáis en orden a la salvación,

Hebreos 3:6

Cristo, por el contrario, lo ha sido en calidad de Hijo, al frente de su casa. Y su casa somos nosotros, con tal que permanezcamos inquebrantables hasta el fin, confesando valientemente nuestra fe y confiados en la esperanza que tenemos.

1 Tesalonicenses 1:3

Sin cesar presentamos a Dios, nuestro Padre, la actividad de vuestra fe, la eficacia de vuestro amor y la firmeza de vuestra esperanza en nuestro Señor Jesucristo.

Colosenses 1:27

a quienes Dios quiso descubrir cuál es la riqueza sublime de este secreto entre los paganos, que es Cristo entre vosotros, la esperanza de la gloria,

Romanos 8:24

Porque en la esperanza fuimos salvados; pero la esperanza que se ve no es esperanza, porque lo que uno ve, ¿cómo puede esperarlo?

Romanos 8:11

Y si el Espíritu del que resucitó a Jesús de entre los muertos habita en vosotros, el que resucitó a Cristo Jesús de entre los muertos vivificará también vuestros cuerpos mortales por obra de su Espíritu, que habita en vosotros.

Juan 1:13

él, que no nació ni de sangre ni de carne, / ni por deseo de hombre / sino de Dios. /

Jonás 4:2

y se encaró así con el Señor: 'Ah, Señor, ¿no lo decía yo ya cuando estaba todavía en mi tierra? ¿Y no fue por esto por lo que me apresuré a ir a Tarsis? Yo sabía que tú eres un Dios clemente, misericordioso y paciente, lleno de compasión y pronto a arrepentirte de las amenazas.

Isaías 26:19

Pero revivirán tus muertos, sus cadáveres resucitarán. Despertaos, regocijaos los que yacéis en el polvo; porque rocío de luz es tu rocío, y el país de las sombras dará a luz.

1 Juan 5:18

Sabemos que el que ha nacido de Dios no peca; pero el Hijo de Dios lo guarda, y el maligno no lo toca.

1 Juan 5:1

El que cree que Jesús es el mesías, ha nacido de Dios; el que ama al que da el ser, ama también al que ha nacido de Dios.

Colosenses 1:23

siempre que perseveréis sólidamente cimentados en la fe y estables e inconmovibles en la esperanza del evangelio que oísteis, el que ha de ser predicado a toda criatura bajo el cielo, y del que yo, Pablo, he sido elegido ministro.

Romanos 5:10

Porque si, siendo enemigos, fuimos reconciliados con Dios por medio de la muerte de su Hijo, mucho más, una vez reconciliados, seremos salvados por su vida.

Romanos 4:25

el cual fue entregado por nuestros pecados y resucitado para nuestra justificación.

Salmos 86:5

Señor, tú que eres bueno y que perdonas, lleno de piedad para los que te invocan,

Salmos 41:13

Tú me sostendrás, porque soy inocente, me tendrás en tu presencia eternamente.

1 Crónicas 29:20

David dijo a toda la asamblea: '¡Bendecid al Señor, nuestro Dios!'. Y toda la asamblea bendijo al Señor, Dios de sus padres, y postrándose se inclinaron reverentes ante el Señor y ante el rey

1 Reyes 8:15

y añadió: 'Bendito sea el Señor, Dios de Israel, que ha cumplido con su propia mano lo que con su boca había prometido a mi padre David diciendo:

1 Juan 4:7

Queridos míos, amémonos los unos a los otros, porque el amor es de Dios; y todo el que ama ha nacido de Dios y conoce a Dios.

1 Tesalonicenses 4:13

Hermanos, no queremos que ignoréis la suerte de los difuntos, para que no os aflijáis como los que no tienen esperanza.

Gálatas 6:16

Paz y misericordia a todos los que vivan conforme a esta regla y al Israel de Dios.

2 Tesalonicenses 2:16

Y que el mismo Señor Jesucristo y Dios, nuestro Padre, que nos ha amado y por su gracia nos ha dado un consuelo eterno y una hermosa esperanza,

1 Pedro 1:13

Por eso, estad preparados vivid sobriamente, y poned toda vuestra esperanza en la gracia que se os dará el día de la manifestación de Jesucristo.

1 Pedro 1:21

los que por él creéis en Dios, el cual habiéndole resucitado de entre los muertos y coronado de gloria viene a ser por lo mismo el objeto de vuestra fe y de vuestra esperanza.

1 Pedro 3:5

Así se adornaban en otro tiempo las santas mujeres que tenían su esperanza puesta en Dios y obedecían a sus maridos;

1 Pedro 3:15

Glorificad en vuestros corazones a Cristo, el Señor, dispuestos siempre a contestar a todo el que os pida razón de vuestra esperanza;

2 Crónicas 31:8

Cuando Ezequías y sus jefes vieron tantos montones, bendijeron al Señor y a su pueblo Israel.