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1 Juan 2:5 - Biblia Martin Nieto

5 Pero el que guarda su palabra, verdaderamente es perfecto en él.

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Más versiones

Biblia Reina Valera 1960

5 pero el que guarda su palabra, en este verdaderamente el amor de Dios se ha perfeccionado; por esto sabemos que estamos en él.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

5 pero los que obedecen la palabra de Dios demuestran verdaderamente cuánto lo aman. Así es como sabemos que vivimos en él.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

5 En cambio, si uno guarda su palabra, el auténtico amor de Dios está en él. Y vean cómo conoceremos que estamos en él:

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La Biblia Textual 3a Edicion

5 pero el que obedece su palabra, en éste verdaderamente se ha perfeccionado el amor de Dios; por esto pues sabemos que estamos en Él.

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

5 En el que guarda su palabra, en éste verdaderamente ha llegado a su plenitud el amor de Dios. En esto conocemos que estamos en él.

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1 Juan 2:5
32 Referencias Cruzadas  

Jesús le contestó: 'El que me ama guardará mi doctrina, mi Padre lo amará y mi Padre y yo vendremos a él y viviremos en él.


El que conoce mis mandamientos y los guarda, ése me ama; y al que me ama lo amará mi Padre, y yo también lo amaré y me manifestaré a él'.


Pero él le dijo: 'Dichosos más bien los que escuchan la palabra de Dios y la ponen en práctica'.


El que guarda sus mandamientos permanece en Dios, y Dios en él. Por esto conocemos que él permanece en nosotros: por el Espíritu que nos ha dado.


dichosos los que guardan sus decretos, los que lo buscan de todo corazón;


Aquí la paciencia de los santos, los que guardan los mandamientos de Dios y la fe de Jesús.


En esto conocemos que amamos a los hijos de Dios: en que amamos a Dios y guardamos sus mandamientos.


Yo soy la vid, vosotros los sarmientos. El que permanece unido a mí y yo en él, da mucho fruto; porque sin mí no podéis hacer nada.


Infundiré mi espíritu en vosotros y haré que viváis según mis preceptos, observando y guardando mis leyes.


En el amor no hay temor; por el contrario, el amor perfecto desecha el temor, pues el temor supone castigo, y el que teme no es perfecto en el amor.


yo te llamo; sálvame, y guardaré tus decretos.


De modo que, el que está en Cristo, es una criatura nueva; lo viejo ya pasó, y ha aparecido lo nuevo.


El dragón se irritó contra la mujer, y se fue a hacer la guerra al resto de su descendencia, a los que guardan los mandamientos de Dios y son fieles testigos de Jesús.


Sabemos también que el Hijo de Dios ha venido y nos ha dado inteligencia para conocer al Verdadero. Nosotros estamos en el Verdadero, en su Hijo Jesucristo. Él es el verdadero Dios y la vida eterna.


Por él vosotros estáis en Cristo Jesús, el cual de parte de Dios se ha hecho para nosotros sabiduría, justicia, santificación y redención,


No hay condenación alguna para los que están unidos a Cristo Jesús.


Tú ves que la fe cooperaba con las obras y que la fe se hizo perfecta con las obras.


Al que no conoció pecado, le hizo pecado en lugar nuestro, para que nosotros seamos en él justicia de Dios.


El que come mi carne y bebe mi sangre vive en mí y yo en él.


El que guarda sus mandatos no experimenta el infortunio, y el sabio sabe cuándo y cómo debe guardarlos.


Dichosos los que guardan el derecho y en todo tiempo practican la justicia.


Por tanto, hijos míos, escuchadme: dichosos los que siguen mis caminos;


Tú has promulgado tus preceptos para que sean estrictamente cumplidos;


El que guarda la ley es un hijo inteligente, el que frecuenta los libertinos es la vergüenza de su padre.


para que guarden sus decretos y observen sus leyes. Aleluya.


En esto consiste la perfección del amor en nosotros: en que tenemos confianza absoluta en el día del juicio; porque como es él, así somos nosotros en este mundo.


El amor consiste en que caminemos según sus mandamientos. Y este mandamiento, tal y como lo habéis recibido desde el principio, es que caminéis en el amor.


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