Biblia Todo Logo
La Biblia Online

- Anuncios -





Lucas 8:30 - Biblia Versión Israelita Nazarena 2011

30 Yahoshúa le preguntó: “¿Cómo te llamas?” Y él dijo: “Legión”. Porque eran muchos los demonios que habían entrado en él;

Ver Capítulo Copiar


Más versiones

Biblia Reina Valera 1960

30 Y le preguntó Jesús, diciendo: ¿Cómo te llamas? Y él dijo: Legión. Porque muchos demonios habían entrado en él.

Ver Capítulo Copiar

Biblia Nueva Traducción Viviente

30 Jesús le preguntó: —¿Cómo te llamas? —Legión —contestó, porque estaba lleno de muchos demonios.

Ver Capítulo Copiar

Biblia Católica (Latinoamericana)

30 Jesús le preguntó: '¿Cuál es tu nombre?' Y él contestó: 'Multitud. Porque muchos demonios habían entrado en él;'

Ver Capítulo Copiar

La Biblia Textual 3a Edicion

30 Jesús le preguntó:° ¿Cómo te llamas? Y él dijo: Legión (porque habían entrado° muchos demonios en él).

Ver Capítulo Copiar

Biblia Serafín de Ausejo 1975

30 Jesús le preguntó: '¿Cuál es tu nombre?'. Él contestó: 'Legión'. Porque eran muchos los demonios que habían entrado en él.

Ver Capítulo Copiar




Lucas 8:30
7 Referencias Cruzadas  

¿O acaso piensas que no puedo invocar a mi Padre y que él no me daría ahora mismo más de doce legiones* de mensajeros?


Su fama se extendió por toda Siria, y le llevaban todos los que tenían dolencias: los que padecían diversas enfermedades y dolores, los endemoniados, los epilépticos y los paralíticos, y él los sanaba.


Y ellos lanzaron gritos diciendo: “¿Qué tienes con nosotros, Hijo de Elohim? ¿Has venido acá para atormentarnos antes de tiempo?”


* Después de haber resucitado, muy de mañana el primer día de la semana se le apareció a Miryam la Magdalena, de la cual había expulsado siete demonios.


Y le preguntó: “¿Cómo te llamas?” Y le dijo: “Me llamo Legión, porque somos muchos”.


y también algunas mujeres que se habían sanado de espíritus malignos y de enfermedades: Miryam, llamada la Magdalena, de la cual habían salido siete demonios;


Porque Yahoshúa había mandado al espíritu inmundo que saliera del hombre, pues se había apoderado de él desde hacía mucho tiempo. Para protegerlo, lo ataban con cadenas y con grillos, pero él rompía las ataduras y el demonio lo impelía a los desiertos.


Síguenos en:

Anuncios


Anuncios


¡Síguenos en WhatsApp! Síguenos