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Juan 8:32 - Biblia Versión Israelita Nazarena 2011

32 y conocerán la verdad, y la verdad los hará libres”.

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Más versiones

Biblia Reina Valera 1960

32 y conoceréis la verdad, y la verdad os hará libres.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

32 y conocerán la verdad, y la verdad los hará libres.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

32 entonces conocerán la verdad, y la verdad los hará libres.

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La Biblia Textual 3a Edicion

32 y conoceréis la verdad, y la verdad os hará libres.

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

32 conoceréis la verdad, y la verdad os hará libres'.

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Juan 8:32
42 Referencias Cruzadas  

Andaré con libertad, porque he buscado tus preceptos.


encamíname en tu verdad y enséñame, pues tú eres mi Elohim libertador, es a ti a quien busco todo el día.


Ustedes son indiferentes a mi reprensión; ahora les voy a decir lo que pienso, les voy a comunicar mis pensamientos.


Porque odiaron el conocimiento, y no escogieron el respeto a Yahweh;


La senda los justos es como la luz del alba, que aumenta su brillo hasta el medio día.


Y muchos pueblos vendrán y dirán: “Vengan, subamos al Monte de Yahweh, a la Casa del Elohim de Yaaqov; para que él nos instruya en sus caminos, y para que caminemos por sus sendas”. Porque de Tsiyón saldrá la Torah, de Yerushalem la palabra de Yahweh.


y cuando te desvíes a la derecha o a la izquierda, tus oídos harán caso al mandato a tus espaldas: “¡Este es el camino; anden por él!”


Y aparecerá allí una carretera, un camino, a la cual llamarán Camino Sagrado. No pasará por ella ningún impuro, sino que será para ellos. Ningún viajero, ni siquiera el simple, se extraviará.


Y todos tus hijos serán discípulos de Yahweh, y grande será la felicidad de tus hijos.


El espíritu de Adonay Yahweh está sobre mí, porque me ha ungido Yahweh; me ha enviado como heraldo de gozo a los humildes, para vendar a los heridos de corazón, para proclamar libertad a los cautivos, liberación a los prisioneros;


Así ha dicho Yahweh: “Párense por los caminos y consideren, pregunten por las sendas antiguas: ¿Cuál es el camino a la felicidad? Caminen por él, y hallen tranquilidad para sus vidas. Pero ellos dijeron: ‘¡No caminaremos por él!’


Procuremos la obediencia a Yahweh, y llegaremos a ser obedientes. Su aparición es tan segura como el alba, y vendrá a nosotros como lluvia, como lluvia tardía que refresca la tierra”.


Entonces él con sus hijos quedará libre de tu autoridad; volverá a su familia y regresará a su propiedad ancestral.


[3:20] Pero para ustedes que respetan mi nombre se levantará un sol de justicia para traerles sanidad. Ustedes saldrán y saltarán como becerros de establo,


Lleven mi yugo sobre ustedes, y aprendan de mí, que soy manso y humilde de corazón; y hallarán descanso para sus vidas.


Y la Palabra se hizo carne y acampó entre nosotros, y vimos su gloria, una gloria como del unigénito del Padre, lleno de amor y verdad.


La Torah se dio por medio de Mosheh, pero el amor y la verdad nos han llegado por medio de Yahoshúa el Mashíaj.


Yahoshúa le dijo: “Yo soy el camino, la verdad y la vida; nadie viene al Padre, sino por mí.


Y cuando venga el espíritu de la verdad, ese los guiará a toda la verdad; pues no hablará por su propia cuenta, sino que hablará todo lo que oiga y les anunciará las cosas venideras.


Santifícalos con la verdad; tu palabra es la verdad.


Está escrito en los Profetas: ‘Y todos recibirán enseñanza de Yahweh’. Así que, todo el que oye y aprende del Padre viene a mí.


Si alguien quiere hacer Su voluntad, conocerá si mi enseñanza proviene de Elohim o si yo hablo por mi propia cuenta.


Así que, si el Hijo los hace libres, serán verdaderamente libres.


Pero ahora, libres del pecado y hechos servidores de Elohim, obtienen el beneficio de una consagración que culmina en vida eterna.


Ustedes no recibieron un espíritu que los haga esclavos para estar otra vez bajo el temor, sino que ustedes recibieron un espíritu que los hace hijos, con el cual clamamos: “¡Ábba!” (¡Padre!)


porque el régimen del espíritu de vida en el Mashíaj Yahoshúa te ha librado del régimen del pecado y de la muerte.


Porque al que en el Maestro lo llaman siendo esclavo, es hombre libre del Maestro. De igual manera, también al que llamaron siendo libre, es siervo del Maestro.


Estén, entonces, firmes en la libertad con que el Mashíaj nos hizo libres, y no se pongan otra vez bajo el yugo de la esclavitud.


Ustedes fueron llamados a la libertad, hermanos; solamente que no usen la libertad como pretexto para la carnalidad. Más bien, sírvanse unos a otros por medio del amor,


que siempre están aprendiendo y nunca logran llegar al conocimiento de la verdad.


Pero el que presta atención a la perfecta ley de la libertad y que persevera en ella, sin ser oidor olvidadizo sino como practicante activo, éste será feliz en lo que hace.


Hablen y actúen como quienes van a ser juzgados por la ley de libertad.


Actúen como libres, y no como los que hacen de la libertad un pretexto para hacer lo malo, sino como siervos de Elohim.


Del anciano para la dama elegida y para sus hijos a quienes amo en verdad –y no sólo yo, sino también todos los que han conocido la verdad–


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