Biblia Todo Logo
La Biblia Online

- Anuncios -





Juan 5:37 - Biblia Versión Israelita Nazarena 2011

37 Y el Padre que me envió ha dado testimonio de mí. Pero ustedes nunca han oído su voz, ni han visto su apariencia,

Ver Capítulo Copiar


Más versiones

Biblia Reina Valera 1960

37 También el Padre que me envió ha dado testimonio de mí. Nunca habéis oído su voz, ni habéis visto su aspecto,

Ver Capítulo Copiar

Biblia Nueva Traducción Viviente

37 El Padre mismo, quien me envió, ha dado testimonio de mí. Ustedes nunca han oído su voz ni lo han visto cara a cara,

Ver Capítulo Copiar

Biblia Católica (Latinoamericana)

37 Y el Padre que me ha enviado también da testimonio de mí. Ustedes nunca han oído su voz ni visto su rostro;'

Ver Capítulo Copiar

La Biblia Textual 3a Edicion

37 El Padre que me envió, Él ha dado testimonio acerca de mí.° Nunca habéis oído su voz, ni habéis visto su aspecto,

Ver Capítulo Copiar

Biblia Serafín de Ausejo 1975

37 Y el Padre que me envió, Él mismo ha dado testimonio de mí. Nunca habéis oído vosotros su voz, nunca habéis visto su rostro;

Ver Capítulo Copiar




Juan 5:37
20 Referencias Cruzadas  

(16) Le dijeron a Mosheh: “Háblanos tú, que no nos hable Elohim, no sea que muramos”.


Pero cuando se le tiene piedad al malvado, no aprende justicia –en un lugar de integridad, hace lo malo –ignora la majestad de Yahweh.


Todavía estaba él hablando, cuando una nube brillante les hizo sombra, y se oyó una voz que salía de la nube diciendo: “Este es mi Hijo amado, en quien me complazco; escúchenlo a él”.


Y se oyó una voz del cielo que decía: “Este es mi Hijo amado, en quien me complazco”.


Entonces se oyó una voz desde el cielo que decía: “Tú eres mi Hijo amado; en ti hallo mi complacencia”.


Y comenzando desde Mosheh y todos los Profetas, les interpretaba en todas las Escrituras lo que decían de él.


y el espíritu de santidad descendió sobre él en forma corporal, como paloma. Luego vino una voz del cielo: “Tú eres mi Hijo amado; en ti me he agradado”.


A Yahweh nadie lo ha visto jamás; el unigénito de Elohim,* que está en el regazo del Padre, él lo ha dado a conocer.


Yahoshúa le dijo: “Tanto tiempo que he estado con ustedes, Felipe, ¿y no me has conocido? El que me ha visto a mí, ha visto al Padre. ¿Cómo dices tú: ‘Muéstranos el Padre’?


“Si yo no hubiera hecho entre ellos obras como ningún otro las ha hecho, no tendrían pecado. Pero ahora las han visto, y aún así nos han aborrecido tanto a mí como a mi Padre.


El que da testimonio de mí es otro, y sé que el testimonio que da de mí es verdadero.


Trabajen, no por la comida que perece, sino por la comida que permanece para vida eterna, que el Hijo del Hombre les dará; porque en éste, el Padre Elohim ha puesto su sello”.


Yo soy el que doy testimonio de mí mismo, y el Padre que me envió también da testimonio de mí”.


Yahweh les habló desde el fuego; ustedes oyeron el sonido de las palabras pero no percibieron ninguna forma –nada sino una voz.


Por tanto, al Rey de los siglos, al inmortal, invisible y único Elohim, sean la honra y la gloria por los siglos de los siglos. Amén.


el único que tiene inmortalidad, que habita en luz inaccesible, a quien ninguno de los hombres ha visto ni puede ver. A él sea la honra y el dominio eterno. Amén.


Nadie ha visto a Elohim jamás. Si nos amamos unos a otros, Elohim permanece en nosotros, y su amor se ha perfeccionado en nosotros.


Si alguien dice: “Yo amo a Elohim” y odia a su hermano, es mentiroso. Porque el que no ama a su hermano a quien ha visto, no puede amar a Elohim a quien no ha visto.


Si recibimos el testimonio de los hombres, el testimonio de Elohim es mayor; porque éste es el testimonio de Elohim: que él ha dado testimonio acerca de su Hijo.


Síguenos en:

Anuncios


Anuncios


¡Síguenos en WhatsApp! Síguenos