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Juan 3:23 - Biblia Versión Israelita Nazarena 2011

23 Yojanán también estaba sumergiendo en Enáyim, junto a Shalem, porque allí había mucha agua; y muchos venían y se sumergían,

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Más versiones

Biblia Reina Valera 1960

23 Juan bautizaba también en Enón, junto a Salim, porque había allí muchas aguas; y venían, y eran bautizados.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

23 En ese tiempo, Juan el Bautista bautizaba en Enón, cerca de Salim, porque allí había mucha agua; y la gente iba a él para ser bautizada.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

23 Juan también estaba bautizando en Ainón, cerca de Salín, porque allí había mucha agua; la gente venía y se hacía bautizar.

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La Biblia Textual 3a Edicion

23 También Juan estaba bautizando en Enón, cerca de Salim, pues había allí muchas aguas, y acudían, y eran bautizados,

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

23 También Juan seguía bautizando en Enón, cerca de Salín, porque había allí aguas abundantes y la gente acudía para bautizarse;

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Juan 3:23
13 Referencias Cruzadas  

Yaaqov llegó a salvo a la ciudad de Shekhem que queda en la tierra de Kenaan –viniendo así de Padán Aram– y acampó frente a la ciudad.


“Oh, tú que habitas junto a muchas aguas, con vastos almacenes, ha llegado tu tiempo, la hora de tu fin.


Tu madre era como una vid en tu sangre, plantada junto a las aguas. Era fructífera y llena de ramas a causa de la abundancia de aguas.


y vi que la Presencia del Elohim de Yisrael venía desde el oriente. Su estruendo era como el estruendo de muchas aguas, y la tierra resplandecía a causa de su Presencia.


Yojanán les decía a las multitudes que iban a que él las sumergiera: “Generación de víboras, ¿quién les enseñó a huir de la ira venidera?


Después de esto, Yahoshúa fue con sus discípulos a la tierra de Yahudah; allí pasaba un tiempo con ellos y sumergía.


ya que a Yojanán todavía no lo habían encarcelado.


Sus pies eran semejantes al bronce bruñido, ardiente como en un horno. Su voz era como el estruendo de muchas aguas.


Oí una voz del cielo como estruendo de muchas aguas y como la voz de un gran trueno. Y la voz que escuché era como de arpistas cuando tocan sus arpas.


Oí como la voz de una gran multitud, como el ruido de muchas aguas y como el sonido de fuertes truenos, diciendo: “¡Haleluyah! Porque reina Yahweh, nuestro Êl Shaday.


Él pasó a la serranía de Efráyim. Cruzó el distrito de Shalíshah, pero no las encontró. Pasaron por el distrito de Shaalim, pero no estaban allí. Atravesaron [todo] el territorio de Binyamín, y ni así las encontraron.


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