Juan 11:43 - Biblia Versión Israelita Nazarena 2011

⁴³ Después de decir esto, llamó con voz fuerte: “¡Elazar, ven fuera!”

Más versiones

Biblia Reina Valera 1960

⁴³ Y habiendo dicho esto, clamó a gran voz: ¡Lázaro, ven fuera!

Biblia Nueva Traducción Viviente

⁴³ Entonces Jesús gritó: «¡Lázaro, sal de ahí!».

Biblia Católica (Latinoamericana)

⁴³ Al decir esto, gritó con fuerte voz: '¡Lázaro, sal fuera!'

La Biblia Textual 3a Edicion

⁴³ Y habiendo dicho esto, clamó a gran voz: ¡Lázaro, ven fuera!

Biblia Serafín de Ausejo 1975

⁴³ Y después de decir esto, gritó con voz potente: '¡Lázaro, sal fuera!'.

Juan 11:43 Referencias Cruzadas

Marcos 4:41

Ellos sintieron un gran temor y se decían unos a otros: “¿Quién será éste, que hasta el viento y el mar le obedecen?”

Juan 11:42

Yo sabía que siempre me oyes; pero lo dije por causa de la gente que está alrededor, para que crean que tú me has enviado”.

Juan 11:44

Y el que había estado muerto salió, atados los pies y las manos con vendas y su cara envuelta en un sudario. Yahoshúa les dijo: “Desátenlo y déjenlo ir”.

Juan 12:1

Seis días antes del Pésaj, llegó Yahoshúa a Bet-Hiní, donde estaba Elazar, a quien él había resucitado de entre los muertos.

Juan 12:9

Entonces mucha gente de los yahuditas se enteró de que él estaba allí; y fueron, no sólo por Yahoshúa, sino también para ver a Elazar, a quien él había resucitado de entre los muertos.

Hechos 3:12

Cuando Shimón Kefá vio esto, se dirigió al pueblo: “Varones yisraelitas, ¿por qué se maravillan de esto? ¿O por qué fijan la vista en nosotros, como si por nuestro propio poder o devoción hubiéramos hecho andar a éste?

Hechos 3:6

Shimón entonces le dijo: “No tengo plata ni oro, pero lo que tengo te doy: en el nombre de nuestro Maestro Yahoshúa el Mashíaj de Natséret, levántate y anda”.

Hechos 9:34

Shimón Kefá le dijo: “Eneas, Yahoshúa el Mashíaj te sana; levántate y haz tu cama”. Y al instante se levantó.

Hechos 9:40

Shimón Kefá, después de hacerlas salir a todas, se puso de rodillas y oró. Luego, volviéndose hacia el cadáver dijo: “Tabita, levántate”. Ella abrió los ojos, y al ver a Shimón Kefá se incorporó.