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Joel 1:14 - Biblia Versión Israelita Nazarena 2011

14 Pregonen un ayuno, proclamen una asamblea; reúnan a los ancianos –a todos los habitantes del país– en la Casa de Yahweh el Elohim de ustedes, y clamen a Yahweh.

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Más versiones

Biblia Reina Valera 1960

14 Proclamad ayuno, convocad a asamblea; congregad a los ancianos y a todos los moradores de la tierra en la casa de Jehová vuestro Dios, y clamad a Jehová.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

14 Proclamen un tiempo de ayuno; convoquen al pueblo a una reunión solemne. Reúnan a los líderes y a toda la gente del país en el templo del Señor su Dios y allí clamen a él.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

14 Proclamen un ayuno y una asamblea santa, congreguen a los ancianos y a toda la gente del campo en la Casa de Yavé, su Dios, y clamen a él.

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La Biblia Textual 3a Edicion

14 ¡Proclamad un ayuno santo! ¡Convocad a solemne asamblea! ¡Reunid a los ancianos, y a todos los moradores de esta tierra, En la Casa de YHVH° vuestro Dios, y clamad a YHVH!

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

14 Promulgad un ayuno, convocad una asamblea reunid a los ancianos, a todos los habitantes del país, en la casa de Yahveh, vuestro Dios, y clamad a Yahveh.

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Joel 1:14
15 Referencias Cruzadas  

Yahú dio órdenes de convocar una asamblea solemne para Báal, y ellos la proclamaron.


Todo Yahudah estaba de pie delante de Yahweh, con sus pequeños, sus mujeres y sus hijos.


Él leía cada día del rollo de la Torah de ha'Elohim, desde el primero hasta el último día. Durante siete días celebraron la festividad, y al octavo día hubo una asamblea solemne, según lo establecido.


“Ve, reúne a todos los yahuditas que viven en Shushán, y ayunen por mí; no coman ni beban en tres días, ni de noche ni de día. Yo también ayunaré con mis doncellas. Después iré donde el rey, aunque sea contrario a la ley; y si perezco, que perezca”


Yahudah está de luto, sus asentamientos languidecen. Los hombres están inclinados hasta el suelo, se levanta el clamor de Yerushalem.


En el mes noveno del quinto año de Yahoyiaqim hijo de Yoshiyahu, rey de Yahudah, proclamaron ayuno delante de Yahweh para todo el pueblo de Yerushalem y para todo el pueblo que venía a Yerushalem de las ciudades de Yahudah.


Escuchen esto, ancianos, presten atención, todos los habitantes del país. ¿Ha sucedido algo como esto en sus días, en los días de sus padres?


por siete días traerán ofrendas encendidas a Yahweh. En el octavo día observarán una ocasión sagrada y traerán una ofrenda encendida a Yahweh; es una reunión solemne: ustedes no trabajarán en sus ocupaciones.


La gente de Nineweh le creyó a Elohim. Proclamaron un ayuno, y grandes y pequeños por igual se vistieron de luto.


Se cubrirán de luto –hombre y bestia– y clamarán fuertemente a Elohim. Que cada uno se vuelva de sus malos caminos y de la injusticia de la que sea culpable.


Reúnanse, júntense, oh nación sin vergüenza,


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