Biblia Todo Logo
La Biblia Online

- Anuncios -





Apocalipsis 3:8 - Biblia Versión Israelita Nazarena 2011

8 Yo conozco tus obras. Mira, he puesto delante de ti una puerta abierta, la cual nadie puede cerrar; porque tienes un poco de poder y has guardado mi palabra y no has negado mi nombre.

Ver Capítulo Copiar


Más versiones

Biblia Reina Valera 1960

8 Yo conozco tus obras; he aquí, he puesto delante de ti una puerta abierta, la cual nadie puede cerrar; porque aunque tienes poca fuerza, has guardado mi palabra, y no has negado mi nombre.

Ver Capítulo Copiar

Biblia Nueva Traducción Viviente

8 »Yo sé todo lo que haces y te he abierto una puerta que nadie puede cerrar. Tienes poca fuerza; sin embargo, has obedecido mi palabra y no negaste mi nombre.

Ver Capítulo Copiar

Biblia Católica (Latinoamericana)

8 Sé lo que vales; he abierto ante ti una puerta que nadie podrá cerrar, pues, por pocas que sean tus fuerzas, has guardado mi palabra y no has renegado de mí.

Ver Capítulo Copiar

La Biblia Textual 3a Edicion

8 Yo sé tus obras. He aquí que he puesto° delante de ti una puerta abierta que nadie puede cerrar, porque aunque tienes poco poder, has guardado mi Palabra y no negaste mi nombre.

Ver Capítulo Copiar

Biblia Serafín de Ausejo 1975

8 'Conozco tus obras. Mira que he dejado ante ti una puerta abierta que nadie puede cerrar; porque, aunque tienes poca fuerza, has guardado mi palabra y no has negado mi nombre.

Ver Capítulo Copiar




Apocalipsis 3:8
25 Referencias Cruzadas  

no vaya a ser que, al estar satisfecho, reniegue, diciendo: “¿Quién es Yahweh?”, o que, al quedar empobrecido, me ponga a robar y profane el nombre de mi Elohim.


Y cuando caigan, serán ayudados con poca ayuda; y muchos se juntarán a ellos con lisonjas.


pero al que me niegue delante de los hombres lo negará delante de los mensajeros de Elohim.


Acuérdense de la palabra que les dije: ‘El siervo no es mayor que su amo’. Si a mí me han perseguido, también a ustedes los perseguirán. Si han guardado mi palabra, también guardarán la de ustedes.


“Yo les he dado a conocer tu nombre a los hombres que del mundo me diste. Eran tuyos, y me los diste; y han guardado tu palabra.


Después de llegar y reunir la comunidad, se pusieron a contarles cuántas cosas había hecho Elohim con ellos, y cómo él les había abierto a los gentiles la puerta de la fe.


porque se me ha presentado la oportunidad para una obra grande y eficaz, aunque hay muchos adversarios.


Cuando llegué a Troas para anunciar la Buena Noticia del Mashíaj, aunque se me había abierto puerta en el Maestro,


Todo lo puedo en Aquel que me fortalece.


Al mismo tiempo, oren también por nosotros, para que Yahweh nos abra una puerta para el mensaje, para comunicar el misterio del Mashíaj, por lo cual estoy aún preso.


Si alguien no cuida de los suyos, y especialmente de los de su casa, ha negado la fe y es peor que un incrédulo.


He peleado la buena batalla; he acabado la carrera; he guardado la fe.


Porque algunos hombres han entrado encubiertamente, los cuales desde antiguo habían sido destinados para esta condenación. Ellos son hombres impíos, que convierten la gracia de nuestro Poderoso en libertinaje y niegan a nuestro único Amo y Maestro, Yahoshúa el Mashíaj.


Yo conozco dónde habitas: donde está el trono del Satán. Y retienes mi nombre y no has negado mi fe, aun en los días de Antipas, mi testigo fiel, a quien mataron entre ustedes, donde mora el Satán.


Yo conozco tus obras, tu arduo trabajo y tu perseverancia; que no puedes soportar a los malos, que has puesto a prueba a los que dicen ser Enviados y no lo son, y que los has hallado mentirosos.


“¡Miren, vengo pronto! Feliz el que guarda las palabras de la profecía de este libro”.


“Escribe al mensajero de la comunidad en Sardis: El que tiene los siete espíritus de Elohim y las siete estrellas dice esto: Yo conozco tus obras, que tienes nombre de que vives, pero estás muerto.


Porque guardaste la palabra de mi paciencia, yo también te guardaré a la hora de la prueba que ha de venir sobre todo el mundo habitado, para probar a los moradores de la tierra.


Yo conozco tus obras, que ni eres frío ni caliente. ¡Mejor sería que fueras frío o caliente!


“Escribe al mensajero de la comunidad en Filadelfia: El Santo y Verdadero, el que tiene la llave de Dawid, el que abre y nadie cierra, y cierra y nadie abre, dice esto:


Síguenos en:

Anuncios


Anuncios


¡Síguenos en WhatsApp! Síguenos