¡Dame ánimo y te obedeceré, pues tú eres un Dios de amor!
Vivifícame conforme a tu misericordia, Y guardaré los testimonios de tu boca.
En tu amor inagotable, perdona mi vida; entonces podré continuar obedeciendo tus leyes.
Por tu bondad dame vida, para que observe el testimonio de tu boca.
Por tu amor, hazme vivir y observaré el aviso de tu boca.