¡Arrojaré de la ciudad de Dios a todos los malhechores! ¡No pasará un solo día sin que yo destruya a todos los malvados del país!
De mañana destruiré a todos los impíos de la tierra, Para exterminar de la ciudad de Jehová a todos los que hagan iniquidad.
Mi tarea diaria será descubrir a los perversos y liberar de sus garras a la ciudad del Señor.
Cada mañana acabaré con todos los malvados del país, para suprimir de la ciudad del Señor a todos los que hacen el mal.
Día a día destruiré a todos los malvados de la tierra, Para extirpar de la ciudad de YHVH a todos los que obran iniquidad.
A todos los impíos del país raeré de mañana, a fin de extirpar de la ciudad de Dios a cuantos hacen el mal.