El Dios que le da la victoria a Israel siempre cumple su palabra, no cambia de opinión, como lo hace la gente.
Además, el que es la Gloria de Israel no mentirá, ni se arrepentirá, porque no es hombre para que se arrepienta.
Y aquel que es la Gloria de Israel, no mentirá ni cambiará de parecer porque no es humano para que cambie de parecer.
El que es la Gloria de Israel no puede mentir ni arrepentirse'.
Además, la Gloria de Israel no miente ni se arrepiente, porque no es hombre para que se arrepienta.
Y el que es el esplendor de Israel no miente ni se arrepiente, porque él no es un hombre para arrepentirse'.