Salmos 89:34 - La Biblia Textual 3a Edicion

³⁴ No olvidaré mi pacto, Ni mudaré lo que salió de mis labios.

Más versiones

Biblia Reina Valera 1960

³⁴ No olvidaré mi pacto, Ni mudaré lo que ha salido de mis labios.

Biblia Nueva Traducción Viviente

³⁴ Por nada romperé mi pacto; no retiraré ni una sola palabra que he dicho.

Biblia Católica (Latinoamericana)

³⁴ No romperé mi alianza ni cambiaré lo que salió de mis labios.

Biblia Serafín de Ausejo 1975

³⁴ Mas no retiraré de él mi favor ni fallaré a mi lealtad;

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

³⁴ No quebrantaré mi pacto, ni mudaré lo que ha salido de mis labios.

Biblia Traducción en Lenguaje Actual

³⁴ 34 (35) Jamás faltaré a mi pacto; siempre le cumpliré mis promesas.

Salmos 89:34 Referencias Cruzadas

2 Samuel 7:15

Pero mi misericordia no se apartará de él como la aparté de Saúl, a quien quité de delante de ti.

1 Reyes 11:39

y por esto humillaré a la descendencia de David, pero no para siempre.°

1 Crónicas 17:13

Yo le seré por padre y él me será por hijo, y no apartaré de él mi misericordia, como la aparté de aquél que estaba antes de ti,

Jeremías 14:21

¡Por amor de tu Nombre, no deseches Ni deshonres el trono de tu gloria! ¡Acuérdate, no anules tu pacto con nosotros!

Jeremías 33:20

Así dice YHVH: Si pudierais anular mi pacto con el día y mi pacto con la noche, de manera que no haya ni día ni noche a su tiempo,

Levítico 26:44

Pero ni aun por todo esto, estando ellos en tierra de sus enemigos, los desecharé ni los aborreceré para destruirlos anulando mi pacto con ellos, porque Yo soy YHVH su Dios.

Malaquías 3:6

Porque Yo, YHVH, no cambio. Por eso vosotros, oh hijos de Jacob, no habéis sido consumidos.

Números 23:19

Dios no es hombre, para que mienta, Ni hijo de hombre para que se arrepienta. Él dijo, ¿y no hará? Habló, ¿y no lo cumplirá?

Mateo 24:35

El cielo y la tierra pasarán, pero mis palabras no pasarán.

Romanos 11:29

Porque irrevocables° son los dones y el llamamiento de Dios.

Santiago 1:17

Toda buena dádiva y todo don perfecto desciende de lo alto, del Padre de las luces, en el cual no hay cambio ni sombra de variación.