Marcos 1:39 - La Biblia Textual 3a Edicion

³⁹ Y entró en las sinagogas de ellos por toda Galilea, predicando y echando fuera los demonios.°

Más versiones

Biblia Reina Valera 1960

³⁹ Y predicaba en las sinagogas de ellos en toda Galilea, y echaba fuera los demonios.

Biblia Nueva Traducción Viviente

³⁹ Así que recorrió toda la región de Galilea, predicando en las sinagogas y expulsando demonios.

Biblia Católica (Latinoamericana)

³⁹ Y Jesús empezó a visitar las Casas de oración de aquella gente, recorriendo toda Galilea. Predicaba y expulsaba a los demonios.

Biblia Serafín de Ausejo 1975

³⁹ Y se fue por toda Galilea, predicando en las sinagogas y expulsando a los demonios.

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

³⁹ Y predicaba en las sinagogas de ellos por toda Galilea, y echaba fuera los demonios.

Biblia Traducción en Lenguaje Actual

³⁹ Jesús recorrió toda la región de Galilea anunciando las buenas noticias en las sinagogas de cada pueblo, y expulsando a los demonios.

Marcos 1:39 Referencias Cruzadas

Mateo 4:23

Y recorría toda Galilea enseñando en las sinagogas de ellos, proclamando el evangelio del reino, y sanando toda enfermedad y toda dolencia en el pueblo.°

Mateo 9:35

Jesús recorría todas las ciudades y las aldeas, enseñando en las sinagogas de ellos, proclamando el evangelio del reino, y sanando toda enfermedad y toda dolencia.°

Marcos 1:21

Y llegan a Cafarnaum, y tan pronto llegaba el sábado, entraba en la sinagoga y enseñaba.

Marcos 1:23

Y en aquel momento estaba en la sinagoga de ellos un hombre con un espíritu inmundo, y chilló,

Marcos 1:38

Les contesta: Vayamos a otra parte, a los pueblos° vecinos, para que también predique allí, pues para esto salí.

Marcos 3:1

Y entró otra vez en la sinagoga, y estaba allí un hombre que tenía seca una mano.

Marcos 6:6

Y estaba asombrado por la incredulidad de ellos; y así, recorría las aldeas de los alrededores enseñando.

Marcos 7:30

Y al llegar a su casa, halló a la niña° acostada en la cama y salido ya el demonio.°

Lucas 4:41

También salían demonios de muchos, vociferando y diciendo: ¡Tú eres el Hijo de Dios! Pero reprendiéndolos, no les permitía hablar estas cosas, porque sabían que Él era° el Mesías.