Ni pestilencia que ande en oscuridad, Ni mortandad que en medio del día destruya.
No temas a la enfermedad que acecha en la oscuridad, ni a la catástrofe que estalla al mediodía.
ni la peste que avanza en las tinieblas, ni la plaga que azota a pleno sol.
de la peste que anda en las tinieblas, o la epidemia que arrasa al mediodía.
Ni en las sombras de la noche, ni a plena luz del día, nos caerá desgracia alguna.