He aquí estos impíos, Sin ser turbados del mundo, alcanzaron riquezas.
Miren a esos perversos: disfrutan de una vida fácil mientras sus riquezas se multiplican.
Miren, pues, cómo son los impíos y sin problemas amasan sus fortunas.
He aquí, que así son los malvados, Y, sin ser turbados, incrementan su riqueza.
Mirad estos impíos, siempre en paz y acreciendo su fortuna.
¡Así son los malvados! ¡No se preocupan de nada, y cada vez son más ricos!