Oh Dios, me enseñaste desde mi juventud, Y hasta ahora he manifestado tus maravillas.
Oh Dios, tú me has enseñado desde mi tierna infancia, y yo siempre les cuento a los demás acerca de tus hechos maravillosos.
Oh Dios, me has enseñado desde joven, y hasta ahora anuncié tus maravillas;'
Tú ’Elohim, me has enseñado desde mi tierna infancia, Y hasta ahora he manifestado tus maravillas.
Desde mi juventud tú, Dios, me instruyes, hasta ahora que refiero tus portentos.
Desde que yo era joven tú has sido mi maestro, y hasta ahora sigo hablando de las maravillas que has hecho.