Porque cuando muera no llevará nada, Ni descenderá tras él su gloria.
Pues al morir, no se llevan nada consigo; sus riquezas no los seguirán a la tumba.
Nada podrá llevar él a su muerte, ni su riqueza podrá bajar con él.
Porque nada llevará en su muerte, ni descenderá tras él su gloria.
No te inquietes si un hombre se enriquece y acrecienta la hacienda de su casa,
17 (18) pues cuando se mueran no van a llevarse nada.