En cuanto a las obras humanas, por la palabra de tus labios Yo me he guardado de las sendas de los violentos.
He seguido tus mandatos, los cuales me impidieron ir tras la gente cruel y perversa.
No he pecado en palabras, como pecan los hombres; he guardado las palabras de tus labios, y seguido las sendas del Soberano.
En cuanto a las obras humanas, Con la palabra de tus labios, Me he guardado del camino del violento,
Ante el obrar del hombre, por la palabra de tus labios, me guardo yo de los caminos violentos.