Mejor me es la ley de tu boca Que millares de oro y plata.
Tus enseñanzas son más valiosas para mí que millones en oro y plata.
La ley de tu boca vale más para mí que millones de oro y plata.
Mejor me es la Ley de tu boca Que millares de oro y plata.
Las leyes de tu boca cuentan más para mí que miles de monedas de oro y plata.
Para mí, ellas son de más valor que el oro y la plata.