Ordena mis pasos con tu palabra, Y ninguna iniquidad se enseñoree de mí.
Guía mis pasos conforme a tu palabra, para que no me domine el mal.
Afirma con tu palabra mis pasos, no dejes que me domine algún mal.
Afirma mis pasos en tu palabra, Y ninguna iniquidad se enseñoree de mí.
Asegura mi paso en tus palabras y que nada perverso me domine.
Guíame, como lo has prometido; ¡yo quiero cumplir tus mandamientos! No dejes que me maltraten, ni me dejes caer en la maldad.