Por tanto, he salido a encontrarte, Buscando diligentemente tu rostro, y te he hallado.
¡Tú eres precisamente al que estaba buscando! ¡Salí a encontrarte y aquí estás!
Salí pues a buscarte para que estés en el banquete y te encontré.
Por lo cual salí a tu encuentro, Ansiosa de verte, y te he hallado.
Por eso te he salido al paso; te buscaba, y ahora te encuentro.
Por eso salí a tu encuentro; te buscaba, ¡y ya te encontré!