Abominación son a Jehová las pesas falsas, Y la balanza falsa no es buena.
El Señor detesta el engaño; no le agradan las balanzas adulteradas.
Un peso para comprar, otro para vender: ¡Yavé los aborrece! No se debe falsear la balanza.
Las pesas desiguales son abominación a YHVH, Y una balanza con trampa no es buena.
Usar dos pesos lo abomina Yahveh, la balanza falsa no está bien.
Dios no soporta dos cosas: que engañes al que te vende, y que engañes al que te compra.