El que guiña el ojo acarrea tristeza; Y el necio de labios será castigado.
Quien guiña el ojo aprobando la maldad, causa problemas, pero una reprensión firme promueve la paz.
Un guiño de ojo te acarrea problemas, un reproche restablecerá la paz.
El que guiña el ojo acarrea tristeza, Y el necio de labios será castigado.
Quien finge con guiños procura tristeza, quien reprende a las claras fomenta la paz.
El engaño causa muchos problemas y la imprudencia lleva a la ruina.